Novus Ordo Saeculorum
La Reforma Protestante de 1517 había destruido la cristiandad europea. A medida que el protestantismo se dividía y debilitaba, existía el deseo naturalista de un nuevo orden mundial reunido en torno al lema «liberté, égalité, fraternité». Iniciado en 1717, el establecimiento de este nuevo orden mundial se conseguiría con la formación de una nueva «religión» organizada a través de sociedades secretas a lo largo de Europa. De 1717 en adelante, el enemigo de la Iglesia católica sería la masonería. Las hermandades masónicas más antiguas parecen derivar del gremio medieval de los canteros. Durante la Reforma, sin embargo, estas logias masónicas tomaron la forma de subversivas sociedades secretas, con ritos ocultos y una filosofía gnóstica. La masonería ocultista deriva, probablemente, de los Rosacruces o de los ritos «Rosa Cruz», popularizados en las regiones protestantes de Alemania. El documento fundacional de la filosofía mística de los rosacruz es Fama Fraternitatis Rosae Crucis (1614), escrito por el alquimista gnóstico Michael Maier (1568-1622). Este documento pretendía haber sido escrito por un hombre llamado «Padre Hermano C.R.C.» o «Christian Rosa Cruz» que habría nacido en 1378 y que, supuestamente, habría vivido 106 años. Habitualmente, este supuesto fundador es conocido como Christian Rosenkreuz. Viajó a Oriente y allí adquirió la sabiduría secreta del zoroastrismo, sufismo y la cábala, así como de maestros gnósticos. La mayoría de las tradiciones identifican a Christian Rosenkreuz como un hereje albigense. El núcleo del movimiento rosacruz son las parábolas místicas y los ritos morales o liturgias que enseñan lecciones ocultas a los iluminados. El misterio central es la alquimia, o la creencia de que uno puede crear oro a partir de sustancias inferiores. Esta es la herejía del naturalismo –manipular la naturaleza para producir algo por encima de la naturaleza-, así como Satanás intentó trascender su propia naturaleza para llegar a ser Dios.
Después de que la Reforma de 1517 dejase un vacío en Europa, la masonería organizó una nueva y universal «iglesia católica», instituida para unir al hombre en el naturalismo, el racionalismo y la hermandad universal. La estrategia de los rosacruces y los masones consiste en intentar crear sociedades secretas para subvertir el orden establecido (católico) y reemplazarlo por un orden iluminado en el cual todas las religiones son aproximaciones a la verdad -todas las religiones se convierten en alegóricas e iguales. La Iglesia católica es el Vetus Ordo Saeculorum-el Viejo Orden Mundial. La masonería es el Novus Ordo Saeculorum – el Nuevo Orden Mundial. La masonería es el intento organizado de conseguir lo que Lucifer intentó, y lo que Adán y Eva intentaron. Es la tentación de la alquimia -transformar plomo en oro. Lucifer, Adán y Eva intentaron transformar su naturaleza en la naturaleza divina. De forma similar, los masones niegan la única encarnación de Jesucristo y rechazan la idea de pecado y la necesidad de que Cristo muriese y resucitase para la salvación de la humanidad. Consecuentemente, no existen la gracia ni los sacramentos, ni tampoco la Iglesia -la sola naturaleza humana es suficiente para la felicidad de la humanidad. Es el error teológico de considerar que la naturaleza no es sanada ni perfeccionada por la gracia. Aún más, es considerar que la naturaleza es divina. La Creación es divina, y debemos buscar la secreta iluminación para ver el nuevo orden de la naturaleza como divino. De manera previsible, la masonería siempre prosperó allá donde el protestantismo había enraizado previamente. Escocia (presbiterianismo), Inglaterra (anglicanismo) y Alemania (luteranismo) son los centros tradicionales de la masonería europea. De forma similar, la América protestante también se vio influida por la masonería, especialmente el sur protestante de Estados Unidos.
Siguiendo a los rosacruces, la masonería adora al «Gran Arquitecto del Universo», el cual es, a la vez, dios y el universo natural. Antiguos miembros de la masonería han revelado que el «Gran Arquitecto de la Masonería» es, en realidad, Satanás. La masonería se organizó formalmente en 1717, doscientos años después de la Reforma de 1517. Surgió a partir del anticatolicismo, del deismo y del racionalismo de su tiempo. La razón, no la fe, era premiada en esa época, y las logias masónicas proliferaron. La religión organizada era rechazada en favor del sentimiento de que todas las religiones eran una forma de búsqueda del desconocido «Gran Arquitecto del Universo». Por este motivo, el masón Benjamin Franklin diezmó a todas las religiones y denominaciones de su época, Es también la razón por la cual los masones custodian las escrituras de todas las religiones en su altar: la Sagrada Biblia, el Corán, los Vedas, el Zend-Avesta, el Zohar, la Cábala, el Bhagavad Gita y los Upanishads. Todas son, para los masones, igualmente verdaderas e igualmente falsas, meros dibujos de niños de guardería que tratan de plasmar a Dios. Dado que todas las religiones organizadas son igualmente aceptadas, el modo de acceder al conocimiento divino es la razón y no la fe, como tampoco el bautismo, la predicación, la Eucaristía, la liturgia o el sacerdocio -y, por supuesto, el papado. La humanidad no necesita la fe -necesita la razón. Este es el resultado de la aseveración de Martín Lutero, que proponía la Sagrada Escritura como única autoridad religiosa. Este principio hizo que cada hombre fuese el único y último juez de la doctrina teológica. Así, la razón privada subjetiva se cuela por la puerta trasera que Lutero dejó abierta sin pretenderlo. La Iglesia católica excomulgó a cualquier católico que se uniese a la masonería, pues es una religión de todas las religiones. A pesar de ser una sociedad secreta, no es ningún secreto su búsqueda de un nuevo orden mundial en el que todas las religiones son honradas y tratadas como igualmente verdaderas. En su persecución de la igualdad, también desea la igualdad en la distribución de las propiedades humanas.
Ahora que hemos establecido el contexto histórico y filosófico de la masonería, podemos volver a la Alta Vendita y la estrategia de los carboneros del siglo XIX. Escrito bajo el pseudónimo de Piccolo Tigre o «Pequeño Tigre», la Instrucción Permanente de la Alta Vendita detalla, de manera precisa, cómo el papado cederá ante la filosofia y las creencias masónicas, y su principio fundamental nunca es lo suficientemente repetido:
El papa, sea quien sea, jamás vendrá a las sociedades secretas. Son las sociedades secretas las que deben dar el primer paso hacia la Iglesia, con miras a conquistar a ambos [a la Iglesia y al papa]. La tarea que nos disponemos a emprender no es de un día, un mes o un año. Podría durar muchos años, quizás un siglo. Entre nuestras filas los soldados mueren, pero la batalla continúa.
Aquí, la Alta Vendita concede que tal vez su proyecto tarde un siglo en realizarse. El Pequeño Tigre explica a continuación cómo conseguirán al papado:
Ahora bien, para asegurarnos al papa según nuestro corazón, es necesario crear para ese papa una generación merecedora del reino que soñamos. Renunciemos a los ancianos y la gente de media edad y dirijámonos a los jóvenes y, si es posible, incluso a los niños.
El Pequeño Tigre explica cómo los jóvenes serán seducidos a lo largo del tiempo a través de la corrupción de sus familias, libros, poemas, institutos, gimnasios, universidades y seminarios. Lo siguiente será seducir y corromper al clero católico: Esa reputación difundirá nuestra doctrina entre los sacerdotes jóvenes, e incluso en los monasterios. En pocos años, será inevitable que ese clero nuevo y joven legue a ocupar todos los cargos, que forme el consejo reinante y se lo llame a elegir el Pontífice que deberá regir la Iglesia. Aunque los jóvenes clérigos corruptos se hayan convertido en cardenales y hayan elegido un papa «según su corazón», aún quedarán algunos obstáculos en el camino: Y como muchos de sus contemporáneos, ese pontífice estará forzosamente empapado de los principios patrióticos y humanitarios que comenzamos a poner en circulación. Es una diminuta semilla de mostaza que estamos sembrando. Mas el amanecer de la justicia nos conducirá a los más elevados poderes, y veréis la cosecha tan copiosa que habrá producido tan pequeña semilla. A lo largo del camino que estamos trazando, para los nuestros será necesario superar numerosos obstáculos y dificultades, pero triunfaremos gracias a la experiencia y la perspicacia.
El Pequeño Tigre se regocija a continuación ante la posibilidad de que un papa masón y naturalista reine sobre la cátedra de San Pedro:
La meta es tan hermosa que debemos izar todas las velas al viento a fin de conseguirla. Si queréis revolucionar Italia, buscad al papa cuyo retrato acabamos de dibujar. Queréis establecer el reino de los elegidos sobre el trono de la Prostituta de Babilonia? Dejad que el clero marche bajo vuestro estandarte mientras inocentemente creen que marchan bajo el estandarte de las Llaves Apostólicas. Queréis eliminar el último vestigio de los tiranos y los opresores? Arrojad vuestras redes como Simón Bar-Joná! Arrojadlas en lo profundo de la sacristía, en los seminarios y monasterios mejor que en el fondo del mar. Y si no os precipitáis, los prometemos una captura más milagrosa que esta! Los pescadores de peces se convirtieron en pescadores de hombres. Vosotros también pescaréis a algunos amigos y los llevaréis a los pies de la Sede Apostólica. Habréis predicado la revolución con tiara y capa pluvial, precedidos por la cruz y el estandarte una revolución que sólo necesitará algo de ayuda para prender fuego en sus cuarteles.
El plan del Pequeño Tigre no incluye panfletos, armas, derramamiento de sangre o ni siquiera elecciones. Requiere una infiltración paso a paso, comenzando por los jóvenes y siguiendo por el clero; entonces, con el paso del tiempo, esos jóvenes y clero se convertirán en cardenales y, por fin, en el papa.
El papa Gregorio XVI se hizo con el documento de la Alta Vendita, pues su redacción tuvo lugar, probablemente, en los años de su pontificado, de 1831 a 1846. En 1832 publicó la encíclica Mirari vos, sobre el liberalismo y la indiferencia religiosa. El documento está escrito contra «los insolentes hombres que se empeñaron en elevar el estandarte de la traición». El papa Gregorio XVI escribe contra lo que parece ser una Revolución francesa llevada a cabo en el interior de la Iglesia católica.
En Mirari vos, se centra y condena siete errores que invadían el corazón de los católicos:
«La abominable conspiración contra el celibato clerical» (n. 1 1).
«Cualquier cosa contraria a la santidad e indisolubilidad del honorable matrimonio de los cristianos» (n. 12).
«Indiferencia. Esta perversa opinión se ha expandido por todas partes por el fraude de los malditos que han expuesto que es posible obtener la salvación eterna del alma por la profesión de cualquier clase de religión, mientras la moral sea mantenida» (n. 13).
«La errónea proposición que enseñia que la libertad de conciencia debe ser conservada por todos» (n. 14).
«La libertad de publicar cualquier escrito y difundirlo entre el pueblo… porque leemos que los propios apóstoles quemaron un gran número de libros (nn. 15-16).
«Ataques en la confianza y sumisión debida a los príncipes; las antorchas de la traición se están encendiendo por doquier» (n. 17).
«Los planes de los que desean vehementemente la separación de la Iglesia del Estado, y la ruptura del concordato entre el sacerdocio y la autoridad temporal (n. 20)
TAYLOR R. MARSHALL. INFILTRACIÓN, EL COMPLOT PARA DESTRUIR LA IGLESIA DESDE DENTRO
