Tormento



Evangelio según san Mateo, 10: 37- 39 «El que ama al padre o a la madre más que a mí, no es digno de mí: y el que ama al hijo o a la hija más que a mí, no es digno de mí; y el que no toma su cruz y me sigue, no es digno de mí; el que halla a su alma, la perderá; y el que perdiere su alma por mí, la hallará». (vv. 37- 39)

La palabra cruz viene de cruciatu (tormento o mortificación). Nosotros podemos cargar con la cruz de dos maneras: o bien dominando nuestra carne por medio de la abstinencia o bien haciendo nuestras por compasión las neecesidades del prójimo. Pero es preciso tener presente, que hay algunos que hacen alarde de la mortificación, no por Dios, sino por una gloria vana y hay también algunos que se entregan por compasión al servicio del prójimo de una manera carnal y no espiritual, de suerte que le conducen como con cierta compasión, no a la virtud sino al pecado. Y así parece que ellos llevan la cruz, pero no siguen al Señor y. Por esto dice: «Y me sigue»

San Gregorio Magno, homiliae in Evangelia, 57

Publicado por paquetecuete

Cristiano Católico Apostólico y Romano

Deja un comentario