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lo explicó, desde su experiencia personal: En la medida en que he ido evolucionando y madurando, creo que la religión más auténtica es el hombre. Es el ser humano el que merece adoración, es el vértice claro del mundo tal como se nos ha mostrado, tal como lo hemos llegado a comprender.
Parecia describir un proceso iniciático aunque no lo reconociera; como si tal camino hacia <el vértice claro del mundo> acaso lo hubiera realizado en solitario. Tampoco reconoció nunca haber ingresado en la Masonería; al contrario. Aunque no desmentía la pertenencia a la misma de su propio abuelo paterno, Juan Rodríguez Lozano, el militar republicano ejecutado durante la guerra civil española. Pero, fuese o no masón, su gobierno fue puramente masónico; dirigido a la ejecución de una ingeniería social anticristiana que parecía ejecutar al dictado del Gran Oriente de Francia, más concretamente del Libro Blanco de la Laicidad publicado por tal organismo.
Según Manue, Guerra, en su gobierno, en 2006, <al menos nueve de sus ministros eran masones, incluyendo al propio presidente (grado 33 en una logia encubierta de Centroeuropa), la Vicepresidenta Fernández de la Vega y los responsables de Justicia y Exteriores>. Aparte de eso, no faltaron masones que le señalaron como uno de sus <hermanos>. En el artículo «La Masonería y sus misterios» publicado en el diario neoyorkino La Prensa, el Venerable Maestro Responsable de la Logia Simbólica La Fraternidad no 387 del valle de Nueva York, Ortiz Burbano de Lara, afirmaba que Zapatero era masón y <alababa su contribución a «los grandes cambios sociopolíticos» ocurridos en España>
En cualquier caso, es evidente que aplicó a la sociedad española un tratamiento de choque, aparentemente irreversible, para imponer la «laicidad» más radical; la cobertura de su eterna lucha contra el Catolicismo; el viejo designio masónico. Todo culmina o empieza-, al parecer, con la adoración del hombre; la invitación de la serpiente a Eva en el Paraíso: <seréis como dioses, conocedores de todo, del bien y del mal. Pero el camino no se detiene ahí, en ese reconocido antropocentrismo; va más allá. Abad-Gallardo lo ha explicado así: Sus misterios [los de la Masonería] se pierden a veces en las fronteras del espiritismo y de las misas negras como lo recordaba en 2011 el padre George Morand (muerto en 2014), antiguo exorcista de la diócesis de Paris.
Padre Michel, Abad de Sainte-Marie de Lagrasse, en Serge Abad-Gallardo, Por qué dejé de ser masón, <Prólogo>, pp. 11 y 12.
José Luis Rodriguez Zapatero a Suso (Xesús Miguel) de Toro en Madera de Zapatero. Retrato de un presidente, p. 205
Nombre simbólico Rousseau. Perteneció a la logia leonesa Emilio Menéndez Pallarás no 15, de la Obediencia de la Gran Logia del Noroeste de España. Era aprendiz grado 10 en 1933.
Manuel Guerra, La trama masónica, p. 418
Gn, 3, 5-6
http://fr.aleteia.org/2015/05/05/les-revelations-fracassantes-dun-ancien-grand-maitre-franc-macon/?
