¿Qué actitud puede adoptar el hombre ante al sufrimiento? 3/3

¿Qué actitud puede adoptar el hombre ante al sufrimiento? 3/3

Manos a la obra: No son cobardes todos estos intentos de huir del sufrimiento? Se debería, no obstante todo, hacer el intento de dar una mano y mejorar lo que se pueda mejorar. Quizá así uno tome parte activa -histórica y conscientemente- en una tendencia general del mundo hacia una realidad mejor, en una tendencia de la nada al ser (E. Bloch), en una tendencia de la bestialidad a la verdadera humanidad (P. Teilhard de Chardin), en una tendencia histórica del hombre alienado de sí mismo hacia una reconciliación general del hombre y la nat uraleza en el <humanismo positivo>, esforzándose por superar las clases que desmiembran a la humanidad (K. Marx). Todas estas tendencias cuentan con un camino largo y difícil, en parte seguramente también sangriento. Pero la meta, que llama y espera en el futuro lejano, merece el esfuerzo de tomar sobre sí un sufrimiento pre-cursor, en caso necesario incluso sufrimientos siempre más duros. Y la ciencia ayudará a eliminar, si bien no la muerte, sí mucho del dolor que puede ser superado. Si bien los sistemas evolucionistas son vistos hoy con escepticismo, si bien nosotros ya sentimos en nuest ro propio cuerpo los aspectos problemáticos del progreso técnico (contaminación del planeta), sin embargo, el verdadero problema de estos sistemas reside menos en la lucha cerrada contra los males -esta lucha parece ser la auténtica tarea de la humanidad- que en el poco valor que se da al individuo que sufre: este, sucumbiendo, ayuda a pavimentar el camino del progreso de la especie. Ni siquiera a Teilhard se le puede ahorrar, sin más, esta objeción. Pero, sobre todo le objetaremos al comunismo: qué ha conseguido hasta ahora con sus innumerables emprendimientos a nivel global? Ha dado siquiera un par de pasos en el camino que conduce a la eliminación del sufrimiento? ¿Es su gulag mejor o, más bien, peor que el sistema de Auschwitz? No es él, acaso, el gran obstáculo para que la humanidad pueda cerrar filas en un frente único contra los grandes males del mundo, ¿o cual hoy es imperioso? Y si el modelo ruso nos desagrada y vamos en búsqueda de una forma más humana: aqué forma encontraremos? Es decir, siempre que partamos de las fuentes auténticamente históricas del sistema, pues todas ellas proceden de un postulado común: quitarle al hombre toda mirada a un horizonte trascendente por medio de un ateísmo radical, para que pueda consagrarse con alma y vida al proyecto de transformar la tierra en la paz eterna del humanismo positivo. Ahora bien, bajo este postulado del ateísmo encontramos todavia el nombre de otro hombre que, odiando mortalmente los supuestos ideales comunistas, anhelaba una humanidad mejor, una super-humanidad: Friedrich Nietzsche. Pero él no tenía la intención de abolir el sufrimiento del mundo, pues tal cosa le parecía no solo imposible, sino también indeseable, ya que despojaría al hombre de lo mejor de sí: su nat uraleza guerrera y depredadora. A él, subido a los hombros de Darwin, no le interesaba otra cosa que la cría de la <bestia rubia>, brutal y despiadada, destructora de todas las tablas de valor existentes, que apareció poco después de él en una forma vulgar: Adolf Hitler. La <voluntad de poder> de Nietzsche (como esencia del ser que debe ser apropiada por el hombre) tuvo su oportunidad en la última guerra mundial. Pero, a pesar de sufrir esta refutación evidente, ¿se le disputará su tesis, es decir, que el hombre fue puesto en el mundo para abrirse camino luchando y así lograr dar lo mejor de sí, mientras que su estar hastiado de luchar, su prurito de paz a cualquier precio podrían ser más bien signos de su decadencia? No es que Nietzsche haya anhelado tal cual las catástrofes humanas que él ha previsto y en las cuales hoy nos encontramos. Pero fue parte de su clarividencia el reconocerlas como consecuencia necesaria de lo que él caracterizó como <el advenimiento del nihilismo>, del que se veia como su principal representante. Y el núcleo central de este nihilismo consiste en la percepción, inexorablemente difundida, de que <Dios ha muerto> y junto con Él también la fe en la existencia de una verdad y de unos valores permanentemente válidos. Que un tal horizonte deje entrever un aumento de sufrimiento para la mayoría de los hombres (pues solo unos pocos podrán ser super-hombres), quitándoles al mismo tiempo toda mirada hacia una reconciliación trascendente, a esta objeción Nietzsche solo pudo, finalmente, antes de sucumbir en la locura, «responder» con la suposición de un <eterno retorno de lo mismo> en un mundo que él describía como <un monstruo que eternamente rumia>. Esto puede ser para los presuntos super-hombres una visión bienaventurada, pero para la masa restante es simplemente la expresión de una pesadilla espantosa. Aparte de estas tres vías -resignación, fuga o un supuesto poner manos a la obra-, cexiste una cuarta por la que la humanidad podría intentar abordar la cuestión del sufrimiento del mundo con alguna esperanza de éxito? No podría nombrar ninguna otra, salvo quizá el sordo ideal de prosperidad al que todos nosotros rendimos homenaje más o menos irreflexivamente, pero con una venda en los ojos que otras épocas más realistas – como la Alta o la Baja Edad Media- preferían no ponerse, para ver más directamente a los ojos las cosas como ellas, de hecho, inexorablemente eran y son. Esos eran tiempos más o menos cristianos, por lo que ha llegado el momento de ocuparnos de lo que el cristianismo tiene para decir sobre nuestra pregunta.

Dios y el sufrimiento. Balthasar, Hans Urs von

#ArquiSantiagoGT #ArzobispadoGT #celam
#IISínodoArquidiocesano #AsambleaSinodal
#SeminarioMayordelaAsunción #CaminemosJuntos #Colegialidad #Eclesialidad
#Sinodalidad #PapaFrancisco #Audiencia #ObisposRD
#SínododelaSinodalidad #familiaiconodesinodalidad
#WalkTogether #Synod2023 #Sinodalidad2023
#sinodalízate #iglesiaensalida #Synodality #ListeningChurch #ForASynodalChurch #SacredSilence #SynodonSynodality #SynodalChurch #SynodofBishops #cebitepal

Publicado por paquetecuete

Cristiano Católico Apostólico y Romano

Deja un comentario