Ningún español culto siente hoy antipatia alguna hacia el pueblo hebreo, pero aún están vivas las sañas hebraicas contra España. Procuran los estudiosos hispanos examinar con serenidad la historia de los judios peninsulares, y algunos llegan a mostrarles férvida devoción; los estudiosos judíos no han logrado a la hora de hoy contemplar el remoto ayer del pueblo hispano con mirar justiciero libre de rencor (.). Los españoles no fueron más crueles con los hebreos que los otros pueblos de Europa, y contra ninguno de ellos han sido sin embargo tan sañudos los hebreo, La convivencia entre judios
y cristianos fue siempre dificil y llegó a ser imposible. pero no porque los hebreos llenaran el vacío dejado por la incapacidad de los cristianos y éstos se dejaran arrastrar por un torturante e invencible complejo de inferioridad. Fue siempre difcil y llegó a ser imposible porque los hebreos intentaron
dominar, y lograron a lo menos explotar al pueblo que les habia dado asilo cuando, huyendo de las persecuciones que padecían en la Europa cristiana o en la España islamita, fueron admitidos en su seno
CLAUDIO SÁNCHEZ Albornoz, España, un enigma histórico Sudamericana, Buenos Aires 1971, 2 vv
