Oración

Creo, Dios mío, que estáis presente en el Santísimo Sacramento del Altar; Os amo, os adoro y deseo recibiros;  mas, no pudiendo hacerlo ahora sacramentalmente, venid por lo menos espiritualmente a mi corazón. Como si hubieseis venido, yo me abrazo y uno a Vos: No permitáis que jamás me separe de Vos. Amén

Señor Jesucristo, ten piedad de mí

La oración de Jesús, interior y constante, es la invocación continua e ininterrumpida del nombre de Jesús con los labios, con el corazón y con la inteligencia, en la certeza de su presencia, en todo lugar, en todo tiempo, incluso durante el sueño. Se formula con estas palabras: «iSeñor Jesucristo, ten piedad de mí!». QuienSigue leyendo «Señor Jesucristo, ten piedad de mí»