Jesús y Simón

Jesús impuso entonces a Simón un nuevo nombre. Pedro -literalmente roca-, nombre propio que no aparece por ninguna parte en registros históricos anteriores a ese momento. Jesús prometió construir un edificio sobrenatural sobre el fundamento de esa roca. Y llamó al edificio Mi Iglesia; porque no sería una institución meramente humana. Sería también, en algún sentido, incorruptible: Los poderes de la muerte (o las puertas de infierno) no prevalecerán contra ella. Así, pues, Dios mismo ofrece garantías de que preservará la autoridad de Pedro.

Publicado por paquetecuete

Cristiano Católico Apostólico y Romano

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