Verdadera devoción, entrega y gratitudHay diversas actitudes auténticas de parte del cristiano para con la Santísima Virgen:



La primera, consiste en honrar a María como Madre de Dios e implorar de tiempo en tiempo su protección, mientras nos esforzamos en cumplir nuestros deberes cristianos, evitando el pecado y obrando por amor, más que por temor.

La segunda, consiste en alimentar un profundo amor, estima, confianza y veneración hacia la Santísima Virgen. Se expresa haciendo conocer el puesto ocupado por Ella en el plan de salvación, publicando sus alabanzas, honrando sus imágenes, recitando el Santo Rosario, alistándose en las Asociaciones Marianas. Esta actitud, siempre que nos comprometamos a vivir cristianamente, es buena, santa y saludable. Pero no logra liberarnos de todo egoísmo, para unirnos perfectamente a Jesucristo.

La tercera, es conocida y vivida por muy pocas personas. Es una consagración total. Consiste en ofrecerse con absoluta disponibilidad a María, para realizar la entrega de sí mismo a Jesucristo. Por esta entrega o consagración nos comprometemos a hacerlo todo con María, por María, para María y en María.

Publicado por paquetecuete

Cristiano Católico Apostólico y Romano

Deja un comentario