Esfuerzos semejantes no tienen ningún derecho a la aprobación de los católicos, pues se apoyan en la opinión errónea de que todas las religiones son mas o menos buenas y loables, en el sentido de que ellas revelan y traducen igualmente, aunque de manera diferente,el sentimiento natural e innato que nos lleva a Dios y nos inclina con respeto ante su poder. Además de que caen en pleno error, los que sostienen ésta opinión rechazan al mismo tiempo la verdadera religión; falseando la noción y llenándola poco a poco de naturalismo y ateísmo.
¿Cómo concluye el Papa?
El Papa concluye: Es entonces perfectamente evidente que es abandonar por completo |a religión divinamente revelada el unirse a los partisanos y propagadores de doctrinas semejantes
PIO XI Mortalium animus EPS-Egl. 855
CATECISMO CATOLICO DE LA CRISIS EN LA IGLESIA Por el Padre Matthias Gaudron
