
O Sapientia, quae ex ore Altissimi prodiisti,
attingens a fine usque ad finem,
fortiter suaviterque disponens omnia:
veni ad docendum nos viam prudentiae
¡Oh, Sabiduría, que brotaste de los labios del Altísimo,
y que abarcas del uno al otro confín,
ordenándolo todo con firmeza y suavidad:
ven a enseñarnos el camino de la salvación! (Cf. Eclo. 24, 3).
Septenario, antifona de adviento