Evangelio según san Mateo, 6: 9- 9 Vosotros, pues, así habéis de orar: Padre nuestro que estás en los cielos. Santificado sea tu nombre». (v. 9)
Añade, pues, el Señor: «Que estás en los cielos», para que sepamos que tenemos un Padre en el cielo, y para que se avergüencen el someterse a las cosas terrenas, los que tiene un Padre en el cielo
Pseudo- Crisóstomo, opus imperfectum in Matthaeum, hom. 14
