Evangelio según san Mateo, 10: 19- 20 «Y cuando os entregaren, no penséis en el modo y en lo que habéis de hablar; porque os será dado en aquella hora lo que habéis de hablar: porque no sois vosotros los que habláis, sino que el Espíritu de vuestro Padre habla en vosotros». (vv. 19- 20)
Porque nuestra fe regularizada por los preceptos divinos, nos enseñará lo que debemos responder: tenemos un ejemplo en Abraham, a quien (después de haberle exigido para el sacrificio a su hijo Isaac) no le faltó un carnero que sirviera de víctima ( Gén 22 ). Y por esta razón sigue: «Porque no sois vosotros los que habláis», etc
San Hilario, in Matthaeum, 10
