Evangelio según san Mateo, 11: 2- 6 Y habiendo oído Juan en la cárcel las obras de Cristo, envió a dos de sus discípulos, y le dijo: «¿ Eres Tú el que has de venir o esperamos a otro?» Y respondiendo Jesús, les dijo: «Id y anunciad a Juan lo que habéis oído y lo que habéis visto: los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos son limpiados, los sordos oyen, los muertos resucitan y los pobres son evangelizados, y bienaventurado el que no fuere escandalizado en Mí». (vv. 2- 6)
No es menor que lo que precede. Por pobres evangelizados debe entenderse, o los pobres de espíritu o los pobres de riquezas, a fin de que en la predicación no haya diferencia entre nobles y plebeyos, entre ricos y necesitados: esto demuestra el rigor de la justicia del Maestro y la verdad del preceptor, puesto que todos los que quieren salvarse son iguales delante de sus ojos
San Jerónimo
