Las implicancias de este fragmento son en verdad reveladoras. En efecto, implica que las singularidades siguen contando porque son inevitables en el tiempo real. En ese tiempo, un astronauta que cae en un agujero negro “sigue acabando mal”. De modo que Hawking se habría contestado su propia pregunta: solo si vivimos en el tiempo imaginario no encontraríamos ninguna singularidad, lo cual no es el caso. Incluso así Hawking insiste en el error y escribe: “Todo esto podría sugerir que el llamado tiempo imaginario es realmente el tiempo real, y que lo que nosotros llamamos tiempo real es solamente una quimera. (…) Así que, tal vez, lo que llamamos tiempo imaginario es realmente más básico, y lo que llamamos real es simplemente una idea que inventamos para ayudarnos a describir cómo pensamos que es el universo”. Pero curiosamente sucede que el propio Hawking, al reconocer que un astronauta que cae en un agujero negro terminaría mal, está aceptando en la práctica que el tiempo que llamamos “real” trae implicancias reales, así que no puede ser un mero invento arbitrario de la mente. Más bien lo que es un invento arbitrario es su modelo y su artificiosa “ontologización” del tiempo imaginario. Finalmente, el último de los grandes problemas que presenta el modelo cuántico de Hawking es su identificación (confusión) del espacio con el tiempo en las etapas tempranas del universo (los famosos 10 a la menos 43 segundos). Y es que es imposible, incluso en las etapas tempranas del universo, que el tiempo sea una dimensión del espacio porque ¡son esencialmente distintos! En efecto: el tiempo está ordenado por las relaciones pasado- futuro con respecto al presente y no hay algo ni aun remotamente similar a esta relación entre puntos del espacio. Pero quizá Hawking podría ser interpretado como sosteniendo no que el tiempo, en una etapa más temprana del universo, es una dimensión del espacio sino que conforme uno retrocede en él, cesa de existir y es reemplazado por una dimensión espacial. O sea, para Hawking, en ese contexto de universo temprano, el tiempo devendría en espacio. Pero tal interpretación no tiene sentido. Significaría que la historia temprana del universo es atemporal. Pero ello resulta contradictorio con la afirmación de que esta etapa se dio antes del inicio del tiempo pues la relación antes- después ¡es precisamente la relación temporal!
A continuación, y a forma de epitafio para la teoría de Hawking, las conclusiones del Dr. William Craig luego de su análisis de los modelos cuánticos (entre los que incluye el de Hawking): “Parece evidente, por lo tanto, que los modelos cuánticos del origen del universo evitan el principio del universo solo a expensas de hacer enormes e injustificadas asunciones metafísicas acerca de la realidad, asunciones que al final niegan la realidad del tiempo y del devenir temporal y por lo tanto vician los modelos basados en ellas como descripciones realistas del universo. Así que, resulta que ninguna de las alternativas del modelo del Big Bang del origen del universo es plausible. La mejor evidencia científica disponible confirma que el universo comenzó a existir”. Queda, pues, en pie la tercera vía.
¿DIOS EXISTE?: El libro que todo creyente deberá (y todo ateo temerá) leer. Dante A. Urbina
