Oh Dios, que por los méritos de San Francisco, tu Confesor, enriqueciste tu Iglesia con una nueva familia, concédenos que, a imitación suya, despreciemos las cosas terrenas y tengamos la dicha de participar eternamente de los dones celestiales.
Camino de crecimiento espiritual hacia Cristo Jesús
Oh Dios, que por los méritos de San Francisco, tu Confesor, enriqueciste tu Iglesia con una nueva familia, concédenos que, a imitación suya, despreciemos las cosas terrenas y tengamos la dicha de participar eternamente de los dones celestiales.
Cristiano Católico Apostólico y Romano Ver más entradas