Homilía de S. Beda Venerable, Presbítero.
Da el nombre de rebaño pequeñito al de los elegidos, ya en comparación del gran número de los réprobos, o más bien por afecto a la humildad. Y esto es porque quiere que su Iglesia, por mucho que se extienda, crezca siempre en humildad hasta el fin del mundo, y que mediante la humildad llegue al reino prometido. Por esto, después de haber consolado dulcemente a esta Iglesia, a la que ordena que tan sólo busque el reino de Dios, le promete el reino que, en su infinita bondad, le dará el Padre
Libro 4, cap. 54 sobre S. Lucas 12
