Evangelio según san Mateo, 5: 7- 7 «Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia». (v. 7)
Se llama misericordioso el que tiene su corazón ocupado por la misericordia porque considera la desgracia de otro como propia y se duele del mal de otro como si fuera suyo
Remigio
