Evangelio según san Mateo, 5: 10- 10 «Bienaventurados los que padecen persecución por la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos». (v. 10)
Una vez establecida y firmada interiormente la paz, aquel que ha de sufrir cualquier clase de persecuciones exteriores, de cualquier manera que sea atribulado exteriormente, dará mayor gloria a Dios
San Agustín, de sermone Domini,. 1, 2
