
El fin principal de la economía del Antiguo Testamento era preparar la venida de Cristo, redentor universal, Aunque contienen elementos imperfectos y pasajeros, los libros del Antiguo Testamento dan testimonio de toda la divina pedagogía del amor salvífico de Dios: Contienen enseñanzas sublimes sobre Dios y una sabiduría salvadora acerca de la vida del hombre, encierran admirables tesoros de oración, y en ellos se esconden el misterio de nuestra salvación.
Moisés con las Tablas de la Ley, de Rembrandt