Evangelio según san Mateo, 1: 19- 19 Y José, su Esposo, como era justo y no quisiese infamarla, quiso dejarla secretamente. (v. 19)
O en otros términos: si a ti solo consta el pecado de otro contra ti, y quieres inculparle ante los hombres, no eres el hermano que corrige, eres su delator. Por eso el varón justo, José, perdonó a su Esposa, lleno de benignidad, el crimen que había sospechado de Ella. Revolvíase ciertamente en su ánimo sospecha indudable de adulterio, mas como a él solo constaba, no quiso difamarla, sino dejarla en secreto, prefiriendo al castigo del pecado el bien del pecador
San Agustín, de Verbo Domini, serm. 16
