Por supuesto, al menos de acuerdo a la ide0logìą de la trānsvērsaliząción de gēmer0, según la cual los gēmer0 no están determinados biológicamente, sino que son solo ficciones sociológicas. Por lo tanto, el hombre y la mujer son solamente imaginarios.
Sin embargo, esto es un disparate científico, porque las características séxūąlęs físicas que generalmente definen a una persona como femenina o masculina también están relacionadas con todo un aparato hormonal y de comportamiento. El hecho de que una persona tenga 0varios o tęstícülos determina su comportamiento como mujer u hombre, porque es ahí donde se segregan las hormonas específicas del gēmer0. Además, hay muchos comportamientos típicos masculinos o femeninos que son innatos. Esto es un conocimiento básico en biología, medicina y etología humana.
Pero hoy en día ya no se hace ciencia que quiera investigar objetivamente y saber cómo es el ser humano, sino que se trata de idēol0gía que quiere transformar al ser humano en lo que debería ser
Las raíces ocultas de la agenda de gènęrø: El plan maestro para una sociedad asêxû@da. Alejandro Kaiser
