Syllabus complectens praecipuos nostrae aetatis errores

Syllabus complectens praecipuos nostrae aetatis errores Errores tocantes a la sociedad civil considerada en sí misma o en sus relaciones con la Iglesia XXXIX. El Estado, como origen y fuente de todos los derechos, goza de cierto derecho completamente ilimitado. (Alocución Maxima quidem, 9 de junio de 1862)XL. La doctrina de la Iglesia católica esSigue leyendo «Syllabus complectens praecipuos nostrae aetatis errores»

Todo a tu árbitro Señor

Evangelio según san Mateo, 8: 1-4 y habiendo bajado del monte, le siguieron muchas turbas; y he aquí que, viniendo un leproso, le adoraba, diciendo: «Señor, si quieres, puedes limpiarme». Y extendiendo la mano le tocó, diciendo: «Quiero, sé limpio», y al punto su lepra fue limpiada. Y Jesús le dijo: «Mira, que no seSigue leyendo «Todo a tu árbitro Señor»

Evangelio

San Mateo 11:25-30En aquel tiempo, tomando Jesús la palabra, dijo: «Yo te bendigo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has ocultado estas cosas a sabios e inteligentes, y se las has revelado a pequeños Sí, Padre, pues tal ha sido tu beneplácito. Todo me ha sido entregado por mi Padre, y nadieSigue leyendo «Evangelio»

Las obras obedecen Tu Voluntad

Evangelio según san Mateo, 8: 1-4 y habiendo bajado del monte, le siguieron muchas turbas; y he aquí que, viniendo un leproso, le adoraba, diciendo: «Señor, si quieres, puedes limpiarme». Y extendiendo la mano le tocó, diciendo: «Quiero, sé limpio», y al punto su lepra fue limpiada. Y Jesús le dijo: «Mira, que no seSigue leyendo «Las obras obedecen Tu Voluntad»

Evangelio

San Mateo 9:1-8Subiendo a la barca, pasó a la otra orilla y vino a su ciudad. En esto le trajeron un paralítico postrado en una camilla. Viendo Jesús la fe de ellos, dijo al paralítico: «¡Ánimo!, hijo, tus pecados te son perdonados.» Pero he aquí que algunos escribas dijeron para sí: «Éste está blasfemando.» Jesús,Sigue leyendo «Evangelio»

Señor, si quieres puedes limpiarme

Evangelio según san Mateo, 8: 1-4 y habiendo bajado del monte, le siguieron muchas turbas; y he aquí que, viniendo un leproso, le adoraba, diciendo: «Señor, si quieres, puedes limpiarme». Y extendiendo la mano le tocó, diciendo: «Quiero, sé limpio», y al punto su lepra fue limpiada. Y Jesús le dijo: «Mira, que no seSigue leyendo «Señor, si quieres puedes limpiarme»

El culto que le debo a Dios

Evangelio según san Mateo, 8: 1-4 y habiendo bajado del monte, le siguieron muchas turbas; y he aquí que, viniendo un leproso, le adoraba, diciendo: «Señor, si quieres, puedes limpiarme». Y extendiendo la mano le tocó, diciendo: «Quiero, sé limpio», y al punto su lepra fue limpiada. Y Jesús le dijo: «Mira, que no seSigue leyendo «El culto que le debo a Dios»