Lex oradi, lex credendi, dice el adagio. Las fórmulas de oración son también la expresión de la fe. No olvidemos que la libertad religiosa está en oposición total con los principios profesados
anteriormente por la Iglesia. Es por eso que los promotores de la libertad religiosa no pueden
invocar a su favor ni la Sagrada Escritura ni la Tradición de la Iglesia. Fueron siempre los enemigos de la Iglesia (heréticos, racionalistas, filósofos de las «luces», francmasones, etc) que reclamaron la libertad religiosa
EI alto dignatario francmasón Yves MARSAUDON, 33° , ministro del Consejo supremo de Francia del R.E.A.A. (Rito.Escocés Antiguo y Aceptado) en su libro E/ Ecumenismo visto por un francmasón de tradición (París, Vitiano, 1964, p.121), habla de la libertad religiosa como de la «Revolución querida por Juan XXII». E insiste: «Podemos verdaderamente hablar de Revolución», la cual «salida de nuestras logias masónicas, se ha entendido maravillosamente en el domo de San Pedro»
CATECISMO CATOLICO DE LA CRISIS EN LA IGLESIA Por el Padre Matthias Gaudron
