Prueba de las profecías
Isaias
35:4 Decid a los de corazón intranquilo: ¡Ánimo, no temáis! Mirad que vuestro Dios viene vengador; es la recompensa de Dios, él vendrá y os salvará.
35:5 Entonces se despegarán los ojos de los ciegos, y las orejas de los sordos se abrirán.
35:6 Entonces saltará el cojo como ciervo, y la lengua del mudo lanzará gritos de júbilo. Pues serán alumbradas en el desierto aguas, y torrentes en la estepa
La Sanación de Ciego, el Greco 1567
