dedicó estudios a asuntos de lo más variados, como lo son la física, la biología, la psicología, la lógica y ciencias de la tierra, llamando a «investigar las causas que operan por sí mismas en la naturaleza» en su De Mineralibus. Según cuenta Pernoud, Alberto también «hizo investigaciones sobre acústica y los tubos sonoros que lo llevaron a construir un autómata parlante, ochocientos años antes que Edison».
Citado en Woods, Cómo la Iglesia construyó la civilización occidental, p. 126.
Pernoud, A la luz de la Edad Media
