La autoridad de la iglesia no fijo el Nuevo Testamento, hasta los siglos cuarto y quinto. Y lo hizo después de una minuciosa investigación en la que intervinieron obispos y sínodo de los obispos. el Canon cristiano completo, o elenco de los Libros que componen el Nuevo Testamento, fué certificado por San Atanasio en el 367 DC, pero no fué aceptado universalmente hasta el Sínodo de Roma 380 y los Concilios de Hipona y Cartago
