La envidia

Publicado porpaquetecuetePublicado en 10. Amarás a tu prójimo como a ti mismo, Antiguo Testamento, Arte, Biblia, Cardinales, Caridad, Católico, Catecismo, Catecismo de la Iglesia Católica, con Dios, con el prójimo, con la naturaleza, con uno mismo, Confesión, Cuatro rupturas, Diez mandamientos, Entendimiento, Envidia, Iglesias, Juan Crisóstomo, Justicia, Ley antigua, Ley moral, Ley revelada, Memoria, Militante, Nuevo Testamento, Pecado, Prudencia, Purgante, Sacramentos, Santos, Social, Templanza, Tres potencias del Alma, Triunfante, Una Santa Católica y Apostólica, Virtudes, Voluntad



representa una de las formas de la tristeza y, por tanto, un rechazo de la caridad; el bautizado debe luchar contra ella mediante la benevolencia. La envidia procede con frecuencia del orgullo; el bautizado ha de esforzarse por vivir en la humildad:

«¿Querríais ver a Dios glorificado por vosotros? Pues bien, alegraos del progreso de vuestro hermano y con ello Dios será glorificado por vosotros. Dios será alabado —se dirá— porque su siervo ha sabido vencer la envidia poniendo su alegría en los méritos de otros» (San Juan Crisóstomo, In epistulam ad Romanos, homilía 7, 5).

Cain mata a Abel, Bartolomeo Manfredi, 1610, museo Kunsthistorisches

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Cristiano Católico Apostólico y Romano

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