Alfa y Omega

La revelación del Nombre inefable «Yo soy el que soy» contiene la verdad de que sólo Dios ES. En este mismo sentido, ya la traducción de los Setenta y, siguiéndola, la Tradición de la Iglesia han entendido el Nombre divino: Dios es la plenitud del Ser y de toda perfección, sin origen y sin fin.Sigue leyendo «Alfa y Omega»

Trinidad

El Símbolo se divide, en tres partes: «primero habla de la primera Persona divina y de la obra admirable de la creación; a continuación, de la segunda Persona divina y del Misterio de la Redención de los hombres; finalmente, de la tercera Persona divina, fuente y principio de nuestra santificación» (Catecismo Romano, 1,1,3). Son «losSigue leyendo «Trinidad»

La Iglesia

Por medio de la Iglesia recibimos la fe y la vida nueva en Cristo por el bautismo. En el Ritual Romano, el ministro del bautismo pregunta al catecúmeno: «¿Qué pides a la Iglesia de Dios?» Y la respuesta es: La fe «¿Qué te da la fe?» La Vida Eterna.

RECONOCE, CRISTIANO, TU DIGNIDAD

Hoy, queridos hermanos, ha nacido nuestro Salvador; alegrémonos. No puede haber lugar para la tristeza, cuando acaba de nacer la vida; la misma que acaba con el temor de la mortalidad, y nos infunde la alegría de la eternidad prometida. Nadie tiene por qué sentirse alejado de la participación de semejante gozo, a todos es comúnSigue leyendo «RECONOCE, CRISTIANO, TU DIGNIDAD»

Antiguo Testamento

El fin principal de la economía del Antiguo Testamento era preparar la venida de Cristo, redentor universal, Aunque contienen elementos imperfectos y pasajeros, los libros del Antiguo Testamento dan testimonio de toda la divina pedagogía del amor salvífico de Dios: Contienen enseñanzas sublimes sobre Dios y una sabiduría salvadora acerca de la vida del hombre,Sigue leyendo «Antiguo Testamento»