Fe y obras

Evangelio según san Mateo, 7: 21- 23 No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos, ése entrará en el reino de los cielos. Muchos me dirán en aquel día: Señor, Seňor, ¿pues no profetizamosSigue leyendo «Fe y obras»

Cuánta más razón los hombres

Evangelio según san Mateo, 6: 26- 27 «Mirad las aves del cielo que no siembran, ni siegan, ni amontonan en hórreos; y vuestro padre celestial las alimenta. ¿Pues no sois vosotros más que ellas? aY quién de vosotros discurriendo puede añadir un codo a su estatura?» (vv. 26-27) Hay algunos que, queriendo exceder a susSigue leyendo «Cuánta más razón los hombres»

Mammona

Evangelio según san Mateo, 6: 24- 24 «Ninguno puede servir a dos señores, porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o al uno sufrirá y al otro despreciará. No podéis servir a Dios ya las riquezas». (v.24) La palabra mammona en siríaco quiere decir riquezas. Oiga esto el avaro que se honra conSigue leyendo «Mammona»

Las primeras reacciones Ante la acción de los primeros movimientos heréticos, tendientes a cambiar el orden establecido (sobre la formación de la Santa inquisición)

el pueblo sencillo no se quedó de brazos cruzados,lo.que hizo ver rápidamente un vacío legal ante los levantamientos que llevaría, con los años, a plantear una legislación ad hoc. Uno de los primeros casos que conmovió la Cristiandad fue el de los cátaros de Orleans, allá por el año 1023. Llegadala secta a Francia graciasSigue leyendo «Las primeras reacciones Ante la acción de los primeros movimientos heréticos, tendientes a cambiar el orden establecido (sobre la formación de la Santa inquisición)»

De la mano del Señor

Evangelio según san Mateo, 6: 1 1- 11 «El pan nuestro que excede toda sustancia, dánosle hoy». (v. 1 1) Otros creen sencillamente, según las palabras del Apóstol, que dice: «Cuando tengamos vestido y comida, estemos contentos con ello: los santos no cuidan más que de la comida de cada día» ( 1Tim 6,8 ).Sigue leyendo «De la mano del Señor»