La conciencia moral

es un juicio de la razón por el que la persona humana reconoce la cualidad moral de un acto concreto que piensa hacer, está haciendo o ha hecho. En todo lo que dice y hace, el hombre está obligado a seguir fielmente lo que sabe que es justo y recto. Mediante el dictamen de suSigue leyendo «La conciencia moral»

Conciencia moral

Presente en el corazón de la persona, la conciencia moral (cf Rm 2, 14-16) le ordena, en el momento oportuno, practicar el bien y evitar el mal. Juzga también las opciones concretas aprobando las que son buenas y denunciando las que son malas (cf Rm 1, 32). Atestigua la autoridad de la verdad con referenciaSigue leyendo «Conciencia moral»

Martirio

La perfección moral consiste en que el hombre no sea movido al bien sólo por su voluntad, sino también por su apetito sensible según estas palabras del salmo: “Mi corazón y mi carne gritan de alegría hacia el Dios vivo” (Sal 84,3). El martirio de San Lorenzo Pellegrino Tibaldi 1591

Voluntad

Los sentimientos más profundos no deciden ni la moralidad, ni la santidad de las personas; son el depósito inagotable de las imágenes y de las afecciones en que se expresa la vida moral. Las pasiones son moralmente buenas cuando contribuyen a una acción buena, y malas en el caso contrario. La voluntad recta ordena alSigue leyendo «Voluntad»

¿PORQUE LOS CATÓLICOS NO LLEVAMOS LA BIBLIA A LA SANTA MISA?

Esta es una pregunta que hacen muchos no católicos para inferir que los católicos no leemos la Biblia en la Misa, o que la tenemos en muy baja estima. Pero lo cierto es que los católicos si leemos la Biblia en la Misa, y no solo eso, estamos cumpliendo más perfectamente el modo bíblico deSigue leyendo «¿PORQUE LOS CATÓLICOS NO LLEVAMOS LA BIBLIA A LA SANTA MISA?»

Hacer el mal para obtener un bien

Es, por tanto, erróneo juzgar de la moralidad de los actos humanos considerando sólo la intención que los inspira o las circunstancias (ambiente, presión social, coacción o necesidad de obrar, etc) que son su marco. Hay actos que, por sí y en sí mismos, independientemente de las circunstancias y de las intenciones, son siempre gravementeSigue leyendo «Hacer el mal para obtener un bien»

Los auténtica belleza

¿Qué puede volver a dar entusiasmo y confianza, qué puede alentar al espíritu humano a encontrar de nuevo el camino, a levantar la mirada hacia el horizonte, a soñar con una vida digna de su vocación, sino la belleza? Vosotros, queridos artistas, sabéis bien que la experiencia de la belleza, de la belleza auténtica, noSigue leyendo «Los auténtica belleza»

Primado

La iglesia cumplió el mandato de los hechos de los apóstoles 1, 20 pues está escrito y que su cargo lo ocupe otro. A Pedro le sucedieron otros primados uno de ellos Clemente dio testimonio de la verdadera autoridad católica de Roma ¡ya en el primer siglo! San Clemente escribió -muy tempranamente en torno alSigue leyendo «Primado»

Libertad

La libertad hace del hombre un sujeto moral. Cuando actúa de manera deliberada, el hombre es, por así decirlo, el padre de sus actos. Los actos humanos, es decir, libremente realizados tras un juicio de conciencia, son calificables moralmente: son buenos o malos

Libertad y gracia

La gracia de Cristo no se opone de ninguna manera a nuestra libertad cuando ésta corresponde al sentido de la verdad y del bien que Dios ha puesto en el corazón del hombre. Al contrario, como lo atestigua la experiencia cristiana, especialmente en la oración, a medida que somos más dóciles a los impulsos deSigue leyendo «Libertad y gracia»