Nuestro destino, nuestra libertad

Las afirmaciones de la Escritura y las enseñanzas de la Iglesia a propósito del infierno son un llamamiento a la responsabilidad con la que el hombre debe usar de su libertad en relación con su destino eterno. Constituyen al mismo tiempo un llamamiento apremiante a la conversión: «Entrad por la puerta estrecha; porque ancha esSigue leyendo «Nuestro destino, nuestra libertad»

Ayuda desinteresada

Día mundial de las familias sin hogar Casi no la había visto. Era una señora anciana con el coche parado en el camino. El día estaba frió, lluvioso y gris. Alberto se pudo dar cuenta que la anciana necesitaba ayuda. Estacionó su coche delante del de la anciana. Aún estaba tosiendo cuando se le acercó.Sigue leyendo «Ayuda desinteresada»

Presentación de la Virgen María

El Templo es enorme, majestuoso, revestido de oro, un polo refulgente que es el centro del universo de Israel. Allí en Jerusalem las multitudes van y vienen de toda la nación judía y también desde la diáspora, pues es obligación y es necesidad peregrinar al Templo en búsqueda de su Dios, al que allí encuentran.Sigue leyendo «Presentación de la Virgen María»

La muerte de un cristiano

En la muerte, Dios llama al hombre hacia sí. Por eso, el cristiano puede experimentar hacia la muerte un deseo semejante al de san Pablo: «Deseo partir y estar con Cristo» (Flp 1, 23); y puede transformar su propia muerte en un acto de obediencia y de amor hacia el Padre, a ejemplo de CristoSigue leyendo «La muerte de un cristiano»

Familia

Mientras lo testigos veían el Milagro del Sol, los tres niños pastores vieron algo diferente: vieron la imagen de un padre y un hijo. San José y el Niño Jesús aparecieron en el cielo, con Jesús bendiciendo al mundo entero. Es como si María, después de atraer la atención del mundo al llamamiento de DiosSigue leyendo «Familia»

Vida

Si es verdad que Cristo nos resucitará en «el último día», también lo es, en cierto modo, que nosotros ya hemos resucitado con Cristo. En efecto, gracias al Espíritu Santo, la vida cristiana en la tierra es, desde ahora, una participación en la muerte y en la Resurrección de Cristo: «Sepultados con él en elSigue leyendo «Vida»

Resurrección

Así como el pan que viene de la tierra, después de haber recibido la invocación de Dios, ya no es pan ordinario, sino Eucaristía, constituida por dos cosas, una terrena y otra celestial, así nuestros cuerpos que participan en la eucaristía ya no son corruptibles, ya que tienen la esperanza de la resurrección» (San IreneoSigue leyendo «Resurrección»

Testigo de Cristo

Ser testigo de Cristo es ser «testigo de su Resurrección» (Hch 1, 22; cf 4, 33), «haber comido y bebido con él después de su Resurrección de entre los muertos» (Hch 10, 41). La esperanza cristiana en la resurrección está totalmente marcada por los encuentros con Cristo resucitado. Nosotros resucitaremos como Él, con Él, porSigue leyendo «Testigo de Cristo»

Y Dios creó el vestido

Genesis 3:21 Y Dios hizo al hombre y a su mujer túnicas de pieles, y los vistió.  Un diseñador, en una entrevista televisiva, junto a un maniquí sobre el que disponía con delicadeza una tela. Aquel hombre menudo, de ojos tranquilos en los que brillaba una chispa creadora, usaba el verbo “modelar” para referirse aSigue leyendo «Y Dios creó el vestido»