– El hombre goza del bien que hace, y siente remordimientos si obra mal. El animal no conoce más que el bien agradable y el mal nocivo a sus sentidos: jamás hallaréis a un animal rastros de remordimientos. Así como no conoce la verdad, este alimento de los espíritus, tampoco conoce el deber, esta fuerza de la voluntad, esta alegría austera del corazón. El bien y el mal moral no pueden ser conocidos sino por la inteligencia
R. P. Hillaire, la religión demostrada LOS FUNDAMENTOS DE LA FE CATÓLICA ANTE LA RAZÓN Y LA CIENCIA
