Sufrimiento y la Gloria venidera

Romanos 8:18 Porque estimo que los sufrimientos del tiempo presente no son comparables con la gloria que se ha de manifestar en nosotros.8:19 Pues la ansiosa espera de la creación desea vivamente la revelación de los hijos de Dios.8:20 La creación, en efecto, fue sometida a la caducidad, no espontáneamente, sino por aquel que laSigue leyendo «Sufrimiento y la Gloria venidera»

EL PAN CELESTIAL Y LA BEBIDA DE SALVACIÓN

Nuestro Señor Jesucristo, en la noche en que iban a entregarlo, tomó pan y, pronunciando la acción de gracias, lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo: «Tomad, comed; esto es mi cuerpo», y, después de tomar el cáliz y pronunciar la acción de gracias, dijo: «Tomad, bebed, ésta es mi sangre». Si fueSigue leyendo «EL PAN CELESTIAL Y LA BEBIDA DE SALVACIÓN»

La oración a Jesús

Pero el Nombre que todo lo contiene es aquel que el Hijo de Dios recibe en su encarnación: JESÚS. El nombre divino es inefable para los labios humanos (cf Ex 3, 14; 33, 19-23), pero el Verbo de Dios, al asumir nuestra humanidad, nos lo entrega y nosotros podemos invocarlo: “Jesús”, “YHVH salva” (cf MtSigue leyendo «La oración a Jesús»

La oración a Jesús

La oración de la Iglesia, alimentada por la palabra de Dios y por la celebración de la liturgia, nos enseña a orar al Señor Jesús. Aunque esté dirigida sobre todo al Padre, en todas las tradiciones litúrgicas incluye formas de oración dirigidas a Cristo. Algunos salmos, según su actualización en la Oración de la Iglesia,Sigue leyendo «La oración a Jesús»