Pecados que claman al cielo

La tradición catequética recuerda también que existen “pecados que claman al cielo”. Claman al cielo: la sangre de Abel (cf Gn 4, 10); el pecado de los sodomitas (cf Gn 18, 20; 19, 13); el clamor del pueblo oprimido en Egipto (cf Ex 3, 7-10); el lamento del extranjero, de la viuda y el huérfanoSigue leyendo «Pecados que claman al cielo»

La realidad

La existencia de la realidad objetiva De acuerdo con este dogma (filosófico) existe una realidad objetiva independientemente de nuestra subjetividad o, para decirlo de otro modo, “existe una realidad externa a nuestra mente”. Y en efecto: la realidad existe. Esta verdad se nos auto-impone. No podemos probarla ni refutarla. Querer probarla sería tanto como intentarSigue leyendo «La realidad»

Vicios

Los vicios pueden ser catalogados según las virtudes a que se oponen, o también pueden ser referidos a los pecados capitales que la experiencia cristiana ha distinguido siguiendo a san Juan Casiano (Conlatio, 5, 2) y a san Gregorio Magno (Moralia in Job, 31, 45, 87). Son llamados capitales porque generan otros pecados, otros vicios.Sigue leyendo «Vicios»

A las afueras del paraíso

El pecado crea una facilidad para el pecado, engendra el vicio por la repetición de actos. De ahí resultan inclinaciones desviadas que oscurecen la conciencia y corrompen la valoración concreta del bien y del mal. Así el pecado tiende a reproducirse y a reforzarse, pero no puede destruir el sentido moral hasta su raíz. ASigue leyendo «A las afueras del paraíso»

Espíritu santo

Todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres pero la blasfemia contra el Espíritu Santo no será perdonada” (Mc 3, 29; cf Mt 12, 32; Lc 12, 10). No hay límites a la misericordia de Dios, pero quien se niega deliberadamente a acoger la misericordia de Dios mediante el arrepentimiento rechaza el perdón deSigue leyendo «Espíritu santo»

Confesión

El hombre, mientras permanece en la carne, no puede evitar todo pecado, al menos los pecados leves. Pero estos pecados, que llamamos leves, no los consideres poca cosa: si los tienes por tales cuando los pesas, tiembla cuando los cuentas. Muchos objetos pequeños hacen una gran masa; muchas gotas de agua llenan un río. MuchosSigue leyendo «Confesión»

Pecado venial

Se comete un pecado venial cuando no se observa en una materia leve la medida prescrita por la ley moral, o cuando se desobedece a la ley moral en materia grave, pero sin pleno conocimiento o sin entero consentimiento El pecado venial debilita la caridad; entraña un afecto desordenado a bienes creados; impide el progresoSigue leyendo «Pecado venial»

Dos clases de personas

Solo existen dos clases de personas que puedan llamarse razonables: aquellas que sirven a Dios de todo corazón, porque le conocen, y aquellas que buscan a Dios de todo corazón porque no le conocen filósofo y matemático francés Blaise Pascal

Pecado mortal

Es una posibilidad radical de la libertad humana como lo es también el amor. Entraña la pérdida de la caridad y la privación de la gracia santificante, es decir, del estado de gracia. Si no es rescatado por el arrepentimiento y el perdón de Dios, causa la exclusión del Reino de Cristo y la muerteSigue leyendo «Pecado mortal»

La ignorancia involuntaria

Puede disminuir, y aún excusar, la imputabilidad de una falta grave, pero se supone que nadie ignora los principios de la ley moral que están inscritos en la conciencia de todo hombre. Los impulsos de la sensibilidad, las pasiones pueden igualmente reducir el carácter voluntario y libre de la falta, lo mismo que las presionesSigue leyendo «La ignorancia involuntaria»