Caída del hombre

El capítulo tercero del libro del Génesis nos relata cómo la mujer, tentada por el diablo, comió del fruto prohibido por Dios, arrastrando también a su esposo a que desobedeciera el mandato divino: «El hombre, tentado por el diablo, dejó morir en su corazón la confianza hacia su creador (cf. Gén 3,1-11) y, abusando deSigue leyendo «Caída del hombre»

Vivir en la verdad

El hombre busca naturalmente la verdad. Está obligado a honrarla y atestiguarla: “Todos los hombres, conforme a su dignidad, por ser personas, se ven impulsados, por su misma naturaleza, a buscar la verdad y, además, tienen la obligación moral de hacerlo, sobre todo con respecto a la verdad religiosa. Están obligados también a adherirse aSigue leyendo «Vivir en la verdad»

Vivir en la verdad

El Antiguo Testamento lo proclama: Dios es fuente de toda verdad. Su Palabra es verdad (cf Pr 8, 7; 2 S 7, 28). Su ley es verdad (cf Sal 119, 142) “Tu verdad, de edad en edad” (Sal 119, 90; Lc 1, 50). Puesto que Dios es el “Veraz” (Rm 3, 4), los miembros deSigue leyendo «Vivir en la verdad»

La caída

Para abordar el tema del pecado es necesario remontarnos a su origen, es decir, a la caída de nuestros primeros padres -Adán y Eva, y devolvernos un poco más hacia atrás para conocer también la caída de los ángeles, pues según el Catecismo, detrás de este primer pecado del hombre «se halla una voz seductora,Sigue leyendo «La caída»

EL OCTAVO MANDAMIENTO

«No darás testimonio falso contra tu prójimo» (Ex 20, 16) «Se dijo a los antepasados: No perjurarás, sino que cumplirás al Señor tus juramentos» (Mt 5, 33) El octavo mandamiento prohíbe falsear la verdad en las relaciones con el prójimo. Este precepto moral deriva de la vocación del pueblo santo a ser testigo de suSigue leyendo «EL OCTAVO MANDAMIENTO»

Pecado venial

«Se comete un pecado venial cuando no se observa en una materia leve la medida prescrita por la ley moral, o cuando se desobedece a la ley moral en materia grave, pero sin pleno conocimiento o sin entero consentimiento.» (Catecismo, 1862). Efectos del pecado venial El pecado venial no priva al alma de la graciaSigue leyendo «Pecado venial»

Las obras de misericordia

son acciones caritativas mediante las cuales ayudamos a nuestro prójimo en sus necesidades corporales y espirituales (cf. Is 58, 6-7; Hb 13, 3). Instruir, aconsejar, consolar, confortar, son obras espirituales de misericordia, como también lo son perdonar y sufrir con paciencia. Las obras de misericordia corporales consisten especialmente en dar de comer al hambriento, darSigue leyendo «Las obras de misericordia»

Justicia con los pobres

El amor a los pobres es incompatible con el amor desordenado de las riquezas o su uso egoísta: «Ahora bien, vosotros, ricos, llorad y dad alaridos por las desgracias que están para caer sobre vosotros. Vuestra riqueza está podrida y vuestros vestidos están apolillados; vuestro oro y vuestra plata están tomados de herrumbre y suSigue leyendo «Justicia con los pobres»

Pecado mortal

“Es la transgresión voluntaria de la ley de Dios en materia grave”[5]. Para que haya pecado mortal se requieren tres condiciones: Materia grave: «La materia grave es precisada por los Diez mandamientos según la respuesta de Jesús al joven rico: “No mates, no cometas adulterio, no robes, no levantes testimonio falso, no seas injusto, honraSigue leyendo «Pecado mortal»

El amor a los pobres

Dios bendice a los que ayudan a los pobres y reprueba a los que se niegan a hacerlo: “A quien te pide da, al que desee que le prestes algo no le vuelvas la espalda” (Mt 5, 42) “Gratis lo recibisteis, dadlo gratis” (Mt 10, 8). Jesucristo reconocerá a sus elegidos en lo que hayanSigue leyendo «El amor a los pobres»