Concepción

Dotada de alma espiritual, de entendimiento y de voluntad, la persona humana está desde su concepción ordenada a Dios y destinada a la bienaventuranza eterna. Camina hacia su perfección en la búsqueda y el amor de la verdad y del bien (cf GS 15, 2)

La iglesia es UNA

Podemos estar seguros que en Jesús ni San Pablo pensaban en una unidad superficial que sólo cubrirá las diferencias. Por el contrario Pablo dice «os exhorto, hermanos por el nombre de nuestro señor Jesucristo a que todos tengáis un mismo lenguaje ya que no haya divisiones entre vosotros, a que viváis unidos con un mismoSigue leyendo «La iglesia es UNA»

Matrimonio

El sacramento del Matrimonio significa la unión de Cristo con la Iglesia. Da a los esposos la gracia de amarse con el amor con que Cristo amó a su Iglesia; la gracia del sacramento perfecciona así el amor humano de los esposos, reafirma su unidad indisoluble y los santifica en el camino de la vidaSigue leyendo «Matrimonio»

Matrimonio sacramental

La alianza matrimonial, por la que un hombre y una mujer constituyen una íntima comunidad de vida y de amor, fue fundada y dotada de sus leyes propias por el Creador. Por su naturaleza está ordenada al bien de los cónyuges así como a la generación y educación de los hijos. Entre bautizados, el matrimonioSigue leyendo «Matrimonio sacramental»

Amor

San Pablo dice: «Maridos, amad a vuestras mujeres como Cristo amó a la Iglesia []Gran misterio es éste, lo digo con respecto a Cristo y la Iglesia» (Ef 5,2532)

Familia

Aquí es donde se ejercita de manera privilegiada el sacerdocio bautismal del padre de familia, de la madre, de los hijos, de todos los miembros de la familia, «en la recepción de los sacramentos, en la oración y en la acción de gracias, con el testimonio de una vida santa, con la renuncia y elSigue leyendo «Familia»

Iglesia doméstica

En nuestros días, en un mundo frecuentemente extraño e incluso hostil a la fe, las familias creyentes tienen una importancia primordial en cuanto faros de una fe viva e irradiadora. Por eso el Concilio Vaticano II llama a la familia, con una antigua expresión, Ecclesia domestica (LG 11; cf. FC 21). En el seno deSigue leyendo «Iglesia doméstica»

Familia

Cristo quiso nacer y crecer en el seno de la Sagrada Familia de José y de María. La Iglesia no es otra cosa que la «familia de Dios». Desde sus orígenes, el núcleo de la Iglesia estaba a menudo constituido por los que, «con toda su casa», habían llegado a ser creyentes (cf Hch 18,8).Sigue leyendo «Familia»

Infertilidad

Sin embargo, los esposos a los que Dios no ha concedido tener hijos pueden llevar una vida conyugal plena de sentido, humana y cristianamente. Su matrimonio puede irradiar una fecundidad de caridad, de acogida y de sacrificio