Prudencia en las acciones

Por eso hay que pedir consejo a personas prudentes y de buena conciencia. Vale mas preferir consejos de personas que son mejores que tu, que amarrarse tercamente a tus propios pareceres. Triunfa quién pide consejos a los sabios. Fracasa quien no acepta consejos de los que saben (Proverbios 1,5) La santidad de vida hace queSigue leyendo «Prudencia en las acciones»

Prudencia en las acciones

Gran sabiduría es no ser precipitado en el obrar. Sabiduría grande es también no ser terco en enfermarse al propio parecer contra el parecer de los prudentes.Señal de sabiduría es no creer sin más ni más todo lo que los otros andan murmurando, y no andar contando a los demás lo que se oyó decirSigue leyendo «Prudencia en las acciones»

Prudencia en las acciones

No hay que fijarse sin más de las palabras que se oyen ni de los consejos que se reciben. Todo debe pensarse ante Dios con prudencia y con calma. Lastima que tan frecuentemente pensemos y hablemos del prójimo más bien lo malo que lo bueno. Es señal de nuestra gran fragilidadPero las personas que tienenSigue leyendo «Prudencia en las acciones»

Gracias Moisés

De esta intimidad con el Dios fiel, lento a la ira y rico en amor (cf Ex 34, 6), Moisés ha sacado la fuerza y la tenacidad de su intercesión. No pide por él, sino por el pueblo que Dios ha reunido. Moisés intercede ya durante el combate con los amalecitas (cf Ex 17, 8-13)Sigue leyendo «Gracias Moisés»

Moisés y la oración del mediador

“Dios hablaba con Moisés cara a cara, como habla un hombre con su amigo” (Ex 33, 11). La oración de Moisés es modelo de la oración contemplativa gracias a la cual el servidor de Dios es fiel a su misión. Moisés “conversa” con Dios frecuentemente y durante largo rato, subiendo a la montaña para escucharleSigue leyendo «Moisés y la oración del mediador»

Moisés y la oración del mediador

También aquí, Dios interviene, el primero. Llama a Moisés desde la zarza ardiendo (cf Ex 3, 1-10). Este acontecimiento quedará como una de las figuras principales de la oración en la tradición espiritual judía y cristiana. En efecto, si “el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob” llama a su servidor Moisés, es queSigue leyendo «Moisés y la oración del mediador»

La Promesa y la oración de la fe

Dios renueva su promesa a Jacob, cabeza de las doce tribus de Israel (cf Gn 28, 10-22). Antes de enfrentarse con su hermano Esaú, lucha una noche entera con “alguien” misterioso que rehúsa revelar su nombre pero que le bendice antes de dejarle, al alba. La tradición espiritual de la Iglesia ha tomado de esteSigue leyendo «La Promesa y la oración de la fe»

Damaso I

Al papa san Dámaso, conocido por sus poesías y epitafios a los mártires de las persecuciones a los cristianos durante el Imperio Romano, el Liber Pontificalis lo considera de origen español y dice también que su padre era un notario de la Iglesia en Roma. Vivió de niño la euforia provocada por la libertad alSigue leyendo «Damaso I»

La Promesa y la oración de la fe

Cuando Dios lo llama, Abraham se pone en camino “como se lo había dicho el Señor” (Gn 12, 4): todo su corazón “se somete a la Palabra” y obedece. La escucha del corazón a Dios que llama es esencial a la oración, las palabras tienen un valor relativo. Por eso, la oración de Abraham seSigue leyendo «La Promesa y la oración de la fe»

LA REVELACIÓN DE LA ORACIÓN EN EL ANTIGUO TESTAMENTO

LA ORACIÓN EN LA VIDA CRISTIANA La revelación de la oración en el Antiguo Testamento se encuadra entre la caída y la elevación del hombre, entre la llamada dolorosa de Dios a sus primeros hijos: “¿Dónde estás? ¿Por qué lo has hecho?” (Gn 3, 9 13) y la respuesta del Hijo único al entrar enSigue leyendo «LA REVELACIÓN DE LA ORACIÓN EN EL ANTIGUO TESTAMENTO»