Almas del purgatorio

Las almas del purgatorio no son para invocarlas “ni para que me despierten”, sino que tenemos la obligación de orar y ofrecer sacrificios por ellas; «“Por eso mandó [Judas Macabeo] hacer este sacrificio expiatorio en favor de los muertos, para que quedaran liberados del pecado” (2 Mac 12, 46). Desde los primeros tiempos, la IglesiaSigue leyendo «Almas del purgatorio»

Purgatorio

2 Macabeos 12,42-45: Judas Macabeo y sus soldados ofrecen oraciones y sacrificios por sus compañeros muertos en batalla con objetos consagrados a los ídolos. Este texto muestra la concepción de los judíos sobre una purificación después de la muerte. Aún hoy los judíos ortodoxos rezan una oración llamada Quaddish durante los once meses siguientes alSigue leyendo «Purgatorio»

Purgatorio

Además, es de lógica el pensar en que todo daño se debe reparar, así mismo pasa con el pecado. Todo pecado causa en el alma dos cosas: culpa y pena (cf. 2 Sam 12,13-14; 24,12). No basta pedir perdón, además hay que resarcir (reparar) el daño hecho, no porque Dios lo necesite sino porque nuestraSigue leyendo «Purgatorio»

Una

«aunque todos los súbditos en los dominios del rey le obedez­can, apostatando de la religión de sus padres, y aunque prefieran cum­plir sus órdenes, yo, mis hijos y mis parientes viviremos según la alianza de nuestros padres. El cielo nos libre de abandonar la ley y nuestras costumbres. No obedeceremos las órdenes del rey, desviándonosSigue leyendo «Una»

Contra el orgullo y sus vanas esperanzas

No te llenes de orgullo por tus buenas obras, pues los juicios humanos son diferentes a los juicios de Dios, a quien muchas veces es menos agradable lo que a los ojos humanos es más agradable. «la mirada de Dios no es como la mirada del hombre, pues el hombre mira las apariencias, pero DiosSigue leyendo «Contra el orgullo y sus vanas esperanzas»

El Purgatorio en la fe de nuestros hermanos Judíos

Hay un estadio intermedio entre la tierra y el cielo. Los israelitas lo llaman el Sheol, morada de los muertos. Y los Judíos contemporáneos a Jesús creían fervientemente que las almas de quienes habían sido fieles a Dios serían «liberadas… de las profundidades del Sheol» Salmo 86, 13. Los judíos piadosos, de entonces y deSigue leyendo «El Purgatorio en la fe de nuestros hermanos Judíos»

Elías, los profetas y la conversión del corazón

Finalmente, volviendo a andar el camino del desierto hacia el lugar donde el Dios vivo y verdadero se reveló a su pueblo, Elías se recoge como Moisés “en la hendidura de la roca” hasta que “pasa” la presencia misteriosa de Dios (cf 1 R 19, 1-14; Ex 33, 19-23). Pero solamente en el monte deSigue leyendo «Elías, los profetas y la conversión del corazón»

Elias en el monte Carmelo

Después de haber aprendido la misericordia en su retirada al torrente de Kérit, Elías enseña a la viuda de Sarepta la fe en la palabra de Dios, fe que confirma con su oración insistente: Dios devuelve la vida al hijo de la viuda (cf 1 R 17, 7-24). En el sacrificio sobre el Monte Carmelo,Sigue leyendo «Elias en el monte Carmelo»

Elías, los profetas y la conversión del corazón

Para el pueblo de Dios, el Templo debía ser el lugar donde aprender a orar: las peregrinaciones, las fiestas, los sacrificios, la ofrenda de la tarde, el incienso, los panes de “la proposición”, todos estos signos de la santidad y de la gloria de Dios, Altísimo pero muy cercano, eran llamamientos y caminos para laSigue leyendo «Elías, los profetas y la conversión del corazón»

David y la oración del rey

El Templo de Jerusalén, la casa de oración que David quería construir, será la obra de su hijo, Salomón. La oración de la Dedicación del Templo (cf 1 R 8, 10-61) se apoya en la Promesa de Dios y su Alianza, la presencia activa de su Nombre entre su Pueblo y el recuerdo de losSigue leyendo «David y la oración del rey»