Sacerdotes y Obispos

Más arriba hemos hecho mención de los congresos y públicas asambleas, por ser reuniones donde los modernistas procuran defender públicamente y propagar sus opiniones.Los obispos no permitirán en lo sucesivo que se celebren asambleas de sacerdotes sino rarísima vez; y si las permitieren, sea bajo condición de que no se trate en ellas de cosasSigue leyendo «Sacerdotes y Obispos»

El dia en el que Cristo celebro el Santo Sacrificio

Al momento de la consagración de la capilla de Einsiedeln: ochenta años después de la muerte de San Meinrado, un piadoso ermitaño de familia de príncipes, llamado Eberhard, fue a duplicar a Conrado, obispo de Constancia, que fuese a consagrar la Capilla del Santo. Fue allá Conrado, y la noche que precedio a la ceremonia,Sigue leyendo «El dia en el que Cristo celebro el Santo Sacrificio»

Escritura Modernista

Dichas estas cosas en general, mandamos especialmente que se guarde con diligencia lo que en el art. 42 de la constitución Officiorum se decreta con estas palabras: «Se prohíbe a los individuos del clero secular tomar la dirección de diarios u hojas periódicas sin previa licencia de su ordinario». Y si algunos usaren malamente deSigue leyendo «Escritura Modernista»

Censores

Pero tampoco basta impedir la venta y lectura de los malos libros, sino que es menester evitar su publicación; por lo cual, los obispos deben conceder con suma severidad la licencia para imprimirlos.Mas porque, conforme a la constitución Officiorum, son muy numerosas las publicaciones que solicitan el permiso del ordinario, y el obispo no puedeSigue leyendo «Censores»

El Don de Cristo

Tal es el don que el Gran Sacerdote Jesucristo, Hijo único de Dios, ofrece diariamente a la Santísima Trinidad en el sacrificio de la Misa. Pero este don no lo ofrece solo: ofrece además, todo lo que Él ha hecho por la gloria de Dios durante los treinta y tres años que pasó en laSigue leyendo «El Don de Cristo»

La pureza exige el pudor

Este es parte integrante de la templanza. El pudor preserva la intimidad de la persona. Designa el rechazo a mostrar lo que debe permanecer velado. Está ordenado a la castidad, cuya delicadeza proclama. Ordena las miradas y los gestos en conformidad con la dignidad de las personas y con la relación que existe entre ellas.

Sobre los rectores de Seminarios

Preceptos estos nuestros y de nuestro predecesor, que conviene tener muy en cuenta siempre que se trate de elegir los rectoresy maestros de los seminarios o de las universídades católicas.Cualesquiera que de algún modo estuvieren imbuidos de modernismo, sin miramiento de ninguna clase sean apartados del oficio, así de regir como de enseñar, y siSigue leyendo «Sobre los rectores de Seminarios»

Filosofía, luego la Teología

Colocado ya así este cimiento de la filosofía, constrúyase con gran diligencia el edificio teológico.Promoved, venerables hermanos, con todas vuestras fuerzas el estudio de la teología, para que los clérigos salgan de los seminarios llenos de una gran estima y amor a ella y que la tengan siempre por su estudio favorito. Pues «en laSigue leyendo «Filosofía, luego la Teología»

Muerte y juicio

“Preguntadle a ese obrero que se dirige a su trabajo: –¿A dónde vas? – Os dirá: ¿Yo?, a trabajar. –¿Y para qué quieres trabajar? –Pues para ganar un jornal. –Y el jornal, ¿para qué lo quieres? –Pues para comer. –¿Y para qué quieres comer? –Pues…, ¡para vivir! –¿Y para qué quieres vivir? Se quedará estupefactoSigue leyendo «Muerte y juicio»

Alter Christus (Sacerdotes)

Nuestro Señor no ha confiado la Misa ni a los ángeles ni a los santos, ni a su Santísima Madre, quienes lejos de profanar este misterios, lo habrían celebrado de la manera más perfecta; y, sin embargo, ¡Qué Misa tan devotamente dicha sería aquella donde oficiara San Pedro, San Pablo, un querubín, un serafin! ¡QuéSigue leyendo «Alter Christus (Sacerdotes)»