La simple explicación (¿?) del desarrollo del hombre a través del trabajo

La trascendencia del hombre con respecto a la naturaleza no surge más que como consecuencia del “salto dialéctico” que se da en la misma en virtud de la transformación del mono en hombre por el proceso de trabajo y la formación del lenguaje. El espíritu es el producto supremo de la materia, pero producto deSigue leyendo «La simple explicación (¿?) del desarrollo del hombre a través del trabajo»

Sinanthropus Pekinensis o el “Hombre de Pekín”

La búsqueda del supuesto “eslabón intermedio” no terminó en Java (en realidad habría que decir “eslabón faltante” porque de lo contrario se está suponiendo que este existió) sino que continuó por décadas. En los últimos 150 años, numerosos han sido los restos fósiles aspirantes al sublime título de “eslabón perdido”, aunque ninguno ha cumplido satisfactoriamenteSigue leyendo «Sinanthropus Pekinensis o el “Hombre de Pekín”»

El Pithecanthropus Erectus (“ Hombre de Java”)

Otro de los grandes “hallazgos” que marcó un hito en la historia de la antropología, fue el del conocido Pithecanthropus Erectus. Su historia comienza allá por 1890 cuando un notable personaje, el joven Eugene Dubois dejaba una sólida y segura perspectiva de práctica médica en Holanda para acoplarse como médico del ejército colonial holandés queSigue leyendo «El Pithecanthropus Erectus (“ Hombre de Java”)»

Sed fuertes

“Apruebo vuestra gimnasia, vuestras carreras de atletismo, en bicicleta o en canoa, vuestro alpinismo y todo lo demás, porque estos pasatiempos libran de la ociosidad, madre de todos los vicios, y porque estas amistosas competiciones serán para vosotros un símbolo de la emulación en la práctica de la virtud […] Sed fuertes en guardar ySigue leyendo «Sed fuertes»

Si no hay Dios, la sociedad es imposible.

Una sociedad no puede subsistir si no existen la autoridad que impone las leyes, la obediencia que las cumple, y las virtudes sociales. Ahora bien, faltando la creencia en Dios, los gobernantes de los pueblos no tienen espíritu de justicia, se convierten en tiranos, y en el poder no buscan más que el modo deSigue leyendo «Si no hay Dios, la sociedad es imposible.»

Si no hay Dios, la sociedad es imposible.

Una sociedad no puede subsistir si no existen la autoridad que impone las leyes, la obediencia que las cumple, y las virtudes sociales. Ahora bien, faltando la creencia en Dios, los gobernantes de los pueblos no tienen espíritu de justicia, se convierten en tiranos, y en el poder no buscan más que el modo deSigue leyendo «Si no hay Dios, la sociedad es imposible.»

Si no hay Dios, la sociedad es imposible.

Una sociedad no puede subsistir si no existen la autoridad que impone las leyes, la obediencia que las cumple, y las virtudes sociales. Ahora bien, faltando la creencia en Dios, los gobernantes de los pueblos no tienen espíritu de justicia, se convierten en tiranos, y en el poder no buscan más que el modo deSigue leyendo «Si no hay Dios, la sociedad es imposible.»

Si no hay Dios, la sociedad es imposible.

Una sociedad no puede subsistir si no existen la autoridad que impone las leyes, la obediencia que las cumple, y las virtudes sociales. Ahora bien, faltando la creencia en Dios, los gobernantes de los pueblos no tienen espíritu de justicia, se convierten en tiranos, y en el poder no buscan más que el modo deSigue leyendo «Si no hay Dios, la sociedad es imposible.»

Si no hay Dios, la sociedad es imposible.

Una sociedad no puede subsistir si no existen la autoridad que impone las leyes, la obediencia que las cumple, y las virtudes sociales. Ahora bien, faltando la creencia en Dios, los gobernantes de los pueblos no tienen espíritu de justicia, se convierten en tiranos, y en el poder no buscan más que el modo deSigue leyendo «Si no hay Dios, la sociedad es imposible.»