¡AY DE MÍ SI NO ANUNCIO EL EVANGELIO!

Venimos por lugares de cristianos que ahora habrá ocho años que se hicieron cristianos. En estos lugares no habitan portugueses, por ser la tierra muy estéril en extremo y paupérrima. Los cristianos de estos lugares, por no haber quien les enseñe en nuestra fe, no saben más de ella que decir que son cristianos. NoSigue leyendo «¡AY DE MÍ SI NO ANUNCIO EL EVANGELIO!»

Sobre el juicio

Este juicio tendrá varias características importantes: Sucederá en la segunda venida gloriosa de Cristo; al respecto, nadie sabe ni el día ni la hora. Se dará allí la resurrección de la carne: los santos recobrarán un cuerpo bendito y los condenados un cuerpo maldito. Estará presente allí, toda la humanidad, desde Adán y Eva hastaSigue leyendo «Sobre el juicio»

EL JUICIO

Podemos imaginar que delante de nosotros funciona día y noche, desde el instante en que empezó nuestra vida consciente y racional, una máquina cinematográfica invisible que está filmando nuestra vida interior y exterior. Es inútil cerrar la puerta con llave para quedarnos completamente solos, de nada sirve apagar la luz, pues el “cine de Dios”Sigue leyendo «EL JUICIO»

Publicaciones

También es deber de los obispos cuidar que los escritos de los modernistas o que saben a modernismo o lo promueven, si han sido publicados, no sean leídos; y, si no lo hubieren sido, no se publiquen.No se permita tampoco a los adolescentes de los seminarios, ni a los alumnos de 1as universidades, cualesquier libros,Sigue leyendo «Publicaciones»

Confesión

El secreto del sacramento de la Reconciliación es sagrado y no puede ser revelado bajo ningún pretexto “El sigilo sacramental es inviolable; por lo cual está terminantemente prohibido al confesor descubrir al penitente, de palabra o de cualquier otro modo, y por ningún motivo” (CIC can 983, § 1)

Los mandamientos

“Maestro, -le preguntaba el joven del Evangelio a Cristo- ¿Qué he de hacer yo de bueno para conseguir la vida eterna?” Y Jesús le responde: “Si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos.” (Mateo 19, 16-17). Los mandamientos no fueron un invento de Dios para coartar la libertad del hombre e impedirle el disfruteSigue leyendo «Los mandamientos»

San Antonio Abad

en una visión contempló que para todo un barrio solamente había un demonio tratando de hacer pecar a la gente, mientras que para una persona espiritual estaban siete demonios atacándola. Y preguntado el por qué, le respondieron: “Es que entre mundanos se invitan a pecar los unos a los otros, en cambio para las personasSigue leyendo «San Antonio Abad»

La tentación y el Pecado

La tentación es la incitación, la invitación al pecado; esta puede provenir de nuestros tres enemigos espirituales: el mundo, el demonio y la carne. “Cada uno es tentado por sus propias concupiscencias, que le atraen y seducen” (Sant 1,14). Hay que aclarar que no es pecado sentir la tentación sino únicamente consentirla, o sea, aceptarlaSigue leyendo «La tentación y el Pecado»

Cruz

Ezequiel 9 4 y Yahvé le dijo: «Recorre la ciudad, Jerusalén, y marca una cruz en la frente de los hombres que gimen y lloran por todas las abominaciones que se cometen en ella.»

La familia y el reino de Dios

Los vínculos familiares, aunque son muy importantes, no son absolutos. A la par que el hijo crece hacia una madurez y autonomía humanas y espirituales, la vocación singular que viene de Dios se afirma con más claridad y fuerza. Los padres deben respetar esta llamada y favorecer la respuesta de sus hijos para seguirla. EsSigue leyendo «La familia y el reino de Dios»