Jesús escucha la oración

La oración a Jesús ya ha sido escuchada por Él durante su ministerio, a través de signos que anticipan el poder de su muerte y de su resurrección: Jesús escucha la oración de fe expresada en palabras (del leproso [cf Mc 1, 40-41], de Jairo [cf Mc 5, 36], de la cananea [cf Mc 7,Sigue leyendo «Jesús escucha la oración»

El Purgatorio

Es la «prisión» de los espíritus donde, segun San Pedro, Jesús se dirigió primero a anunciar la salvación (1 Pedro 3, 19-20). Los judíos lo llamaron Sheol. El nuevo testamento griego lo llama Hades (como distinto de la Gehenna, el lugar del fuego infernal), los católicos le llamamos purgatorio. Los primeros cristianos conocían eso. SiSigue leyendo «El Purgatorio»

La Dignidad Sacerdotal

El sacerdote puede decir de sí mismo con San AgustínAquel que me ha creado sin mi participación, es creado con mi concurso: Aquel que ha hecho todo de la nada sin mi ayuda, me ha dado el poder, de producirle a Él. ¿No es este un gran misterio y un gran milagro que excede aSigue leyendo «La Dignidad Sacerdotal»

El dia en el que Cristo celebro el Santo Sacrificio

Al momento de la consagración de la capilla de Einsiedeln: ochenta años después de la muerte de San Meinrado, un piadoso ermitaño de familia de príncipes, llamado Eberhard, fue a duplicar a Conrado, obispo de Constancia, que fuese a consagrar la Capilla del Santo. Fue allá Conrado, y la noche que precedio a la ceremonia,Sigue leyendo «El dia en el que Cristo celebro el Santo Sacrificio»

La oración como don de Dios

“La oración es la elevación del alma a Dios o la petición a Dios de bienes convenientes”(San Juan Damasceno, Expositio fidei, 68 [De fide orthodoxa 3, 24]) ¿Desde dónde hablamos cuando oramos? ¿Desde la altura de nuestro orgullo y de nuestra propia voluntad, o desde “lo más profundo” (Sal 130, 1) de un corazón humildeSigue leyendo «La oración como don de Dios»

El combate por la pureza

El Bautismo confiere al que lo recibe la gracia de la purificación de todos los pecados. Pero el bautizado debe seguir luchando contra la concupiscencia de la carne y los apetitos desordenados. Con la gracia de Dios lo consigue — mediante la oración: «Creía que la continencia dependía de mis propias fuerzas, las cuales noSigue leyendo «El combate por la pureza»

Biblia

«Si crees lo que te gusta en los evangelios y rechazas lo que no te gusta, no crees en el evangelio, sino en ti mismo». San Agustín de Hipona

¡OH ETERNA VERDAD, VERDADERA CARIDAD Y CARA ETERNIDAD!

Del libro de las Confesiones de san Agustín, obispo(Libros 7,10.18;10, 27: CSEL 33,157-163. 255) Habiéndome convencido de que debía volver a mí mismo, penetré en mi interior, siendo tú mi guía, y ello me fue posible porque tú, Señor, me socorriste. Entré, y vi con los ojos de mi alma, de un modo u otro,Sigue leyendo «¡OH ETERNA VERDAD, VERDADERA CARIDAD Y CARA ETERNIDAD!»

Decálogo

Desde san Agustín, los “diez mandamientos” ocupan un lugar preponderante en la catequesis de los futuros bautizados y de los fieles. En el siglo XV se tomó la costumbre de expresar los preceptos del Decálogo en fórmulas rimadas, fáciles de memorizar, y positivas. Estas fórmulas están todavía en uso hoy. Los catecismos de la IglesiaSigue leyendo «Decálogo»

Toda Santa

Al igual que María fue preservada para Dios en lo que atañe a su capacidad procreadora, más todavía fue preservada del pecado. Por eso el Evangelio de Juan la presenta como «Nueva Eva», porque Eva fue la otra mujer creada libre de la herencia de pecado. Ser la Llena de Gracia es estar sin pecado;Sigue leyendo «Toda Santa»