¡La gloria de Dios!

He aquí el alfa y la omega, el principio y el fin de toda la creación. La misma encarnación del Verbo y la redención del género humano no tienen otra finalidad última que la gloria de Dios: cuando le queden sometidas todas las cosas, entonces el mismo Hijo se sujetará a quien a El todoSigue leyendo «¡La gloria de Dios!»

Diversos impulsos de la Naturaleza y de la Gracia

La Naturaleza no quiere mortificarse, ni reprimirse, ni vencerse, ni obedecer, ni someterse voluntariamente A la naturaleza le gusta que la honren y reverencien; la gracia atribuye fielmente a Dios toda honra y toda gloria #naturaleza #gracia #mortificación #reprimir #vencer #obedecer #sometimiento #voluntad #honra #reverencia #honrasoloaDios #GloriaaDios #imitacióndecristo #tomasdekempis #1418

El Canon 1251, la norma de la Iglesia Católica que establece la abstinencia de carne todos los viernes

El Código de Derecho Canónico del Vaticano efectivamente contiene una instrucción, el Canon 1251, que aborda explícitamente el tema del consumo de carne. «Todos los viernes, a no ser que coincidan con una solemnidad, debe guardarse la abstinencia de carne, o de otro alimento que haya determinado la Conferencia Episcopal», dice la norma. Así, losSigue leyendo «El Canon 1251, la norma de la Iglesia Católica que establece la abstinencia de carne todos los viernes»

Práctica de la mortificación

La mortificación debe practicarse con prudencia y discreción. Debe ser proporcionada a las fuerzas físicas y morales de cada cual, y al cumplimiento de las obligaciones de nuestro propio estado. Es importante mortificar todos los sentidos El olfato, soportando pacientemente olores desagradables y no teniendo inclinación desordenada a perfumes y olores agradables

Práctica de la mortificación

La mortificación debe practicarse con prudencia y discreción. Debe ser proporcionada a las fuerzas físicas y morales de cada cual, y al cumplimiento de las obligaciones de nuestro propio estado. Es importante mortificar todos los sentidos: El tacto no dándole todos los placeres que pide. Cuidándonos principalmente de los malos deleites. Pero también se haSigue leyendo «Práctica de la mortificación»

¿Por qué es necesaria la mortificación?

Porque nos sana de las consecuencias del pecado original “La vida del hombre sobre la tierra es una lucha” (Job 8,1). Esta batalla interior ha sido descrita en la tradición bíblica y espiritual de la Iglesia como la “lucha entre la carne y el espíritu”, entre el “hombre viejo y el hombre nuevo” (Ef 4,17-32),Sigue leyendo «¿Por qué es necesaria la mortificación?»

El más grande regalo

«Cuańdo esté preparado en esta vida de amor y de celo, pediré al buen Jesús otra gracia, que es precisamente el don más precioso que pueda conceder a las almas de sus fieles, y que es éste: ser crucificado en el cuerpo y en el alma, consumiéndose incesantemente en su martirio de amor… Corazón agonizanteSigue leyendo «El más grande regalo»

CHRISTUS AB OMNI PLEBEM SUM DEFENDAT

(Que Jesucristo nos defienda de todo mal) La Eucaristía es el divino pararrayos que aparta de nuestras cabezas los rayos de la justicia divina. Del mismo modo que una madre bondadosa y tierna, para librar a su hijo de la cólera de su padre irritado lo esconde entre sus brazos y con su cuerpo formaSigue leyendo «CHRISTUS AB OMNI PLEBEM SUM DEFENDAT»

CHRISTUS REGNAT

(Cristo reina) Jesús no reina sobre los territorios, sino sobre las almas: reina por la Eucaristía. El dominio efectivo de un rey consistirá en que sus súbditos guarden sus leyes y le profesen un amor verdadero. Ahora bien, la Eucaristía es la ley del cristianismo: ley de caridad, ley de amor, promulgada en el cenáculoSigue leyendo «CHRISTUS REGNAT»

El obelisco de la plaza vaticana de San Pedro

El obelisco fue recolocado el 10 de septiembre de 1586 en la famosa plaza vaticana por el Papa Sixto V El Obelisco Vaticano es uno de los trece obeliscos antiguos de Roma y está situado en la plaza de San Pedro. Realizado en granito rojo, tiene una altura de 25.3 metros y con el basamentoSigue leyendo «El obelisco de la plaza vaticana de San Pedro»