1. La aspiración a la justicia y al reconocimiento efectivo de la dignidad de cada ser humano requiere, como toda aspiración profunda, ser iluminada y guiada.2. En efecto, se debe ejercer el discernimiento de las expresiones, teóricas y prácticas, de esta aspiración. Pues son numerosos los movimientos políticos y sociales que se presentan como portavocesSigue leyendo «EXPRESIONES DE ESTA ASPIRACIÓN (LIBERACIÓN)»
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UNA ASPIRACIÓN
1. La poderosa y casi irresistible aspiración de los pueblos a una liberación constituye uno de los principales signos de los tiempos que la Iglesia debe discernir e interpretar a la luz del Evangelio[1]. Este importante fenómeno de nuestra época tiene una amplitud universal, pero se manifiesta bajo formas y grados diferentes según los pueblos.Sigue leyendo «UNA ASPIRACIÓN»
El error de la teología de la Liberación
En efecto, ante la urgencia de los problemas, algunos se sienten tentados a poner el acento de modo unilateral sobre la liberación de las esclavitudes de orden terrenal y temporal, de tal manera que parecen hacer pasar a un segundo plano la liberación del pecado, y por ello no se le atribuye prácticamente la importanciaSigue leyendo «El error de la teología de la Liberación»
Teología de la liberación
El Evangelio de Jesucristo es un mensaje de libertad y una fuerza de liberación. En los últimos años esta verdad esencial ha sido objeto de reflexión por parte de los teólogos, con una nueva atención rica de promesas.La liberación es ante todo y principalmente liberación de la esclavitud radical del pecado. Su fin y suSigue leyendo «Teología de la liberación»
Causas de la pereza espiritual
Dos causas principales contribuyen a su desarrollo: una alimentación espiritual deficiente, y la invasión de algún germen dañino. Alimentación espiritual deficiente: Para vivir y crecer en la vida, nuestra alma necesita de una buena alimentación espiritual; pero el pasto del alma son los diversos ejercicios espirituales, como meditaciones, lecturas, oraciones, exámenes, el cumplimiento de lasSigue leyendo «Causas de la pereza espiritual»
Deicidio
«Estos días me leyeron un párrafo del Cardenal Bea acerca de los que mataron a Cristo: dice que no el pueblo judío, sino algunos funcionarios judíos mataron a Cristo; pero esos mismos no pueden llamarse “deicidas” porque no sabían que Cristo era Dios. Con todo respeto, podemos advertir que no sabían lo que era Cristo,Sigue leyendo «Deicidio»
Juro
mantengo con toda certeza y profeso sinceramente que la fe no es un sentido religioso ciego que surge de las profundidades del subconsciente, bajo el impulso del corazón y el movimiento de la voluntad moralmente informada, sino que un verdadero asentimiento de la inteligencia a la verdad adquirida extrínsecamente, asentimiento por el cual creemos verdadero,Sigue leyendo «Juro»
Juramento
admito y reconozco los argumentos externos de la revelación, es decir los hechos divinos, entre los cuales en primer lugar, los milagros y las profecías, como signos muy ciertos del origen divino de la religión cristiana. Y estos mismos argumentos, los tengo por perfectamente proporcionados a la inteligencia de todos los tiempos y de todosSigue leyendo «Juramento»
San Antonio de Padua con el Niño Jesús
Antonio de Pereda (1611–1678)
La ideología de género
Las feministas promotoras de la ideología de género, como Simone de Beauvoir, enseñan que para acabar con la diferencia entre hombre y mujer, hay que acabar completamente con la distinción entre lo femenino y lo masculino, entre hombre y mujer, es decir, ya no hablamos de sexo porque está ligado a lo biológico, sino deSigue leyendo «La ideología de género»