Libre interpretación

La Sagrada Escritura, no puede ser interpretada libremente, pues ésta ha sido confiada a la Iglesia, por quien fue definida. A continuación, unas palabras de La Constitución dogmática Dei Verbum, en el numeral 9 y 10: «La Tradición y la Escritura están estrechamente unidas y compenetradas; manan de la misma fuente, se unen en unSigue leyendo «Libre interpretación»

Los Cismas: El “No” a la unidad

En 1517, Martín Lutero se separa de la Iglesia fraccionando el cuerpo místico de Cristo, y dando origen así al protestantismo. A partir de allí se da el surgimiento de multitud de denominaciones protestantes, y es así como hoy existen más de 40.000 sectas. Sin embargo, hay que aclarar que existe un protestantismo histórico, conSigue leyendo «Los Cismas: El “No” a la unidad»

La formación cristiana

los Cristianos tenemos el deber de formarnos y conocer a fondo nuestra fe, pues como nos lo dijo nuestro primer Papa, el apóstol San Pedro: estad “siempre dispuestos a dar respuesta a todo el que os pida razón de vuestra esperanza” (1 Pe 3,15)

LA TRADICIÓN DE LA ORACIÓN

La oración no se reduce al brote espontáneo de un impulso interior: para orar es necesario querer orar. No basta sólo con saber lo que las Escrituras revelan sobre la oración: es necesario también aprender a orar. Pues bien, por una transmisión viva (la sagrada Tradición), el Espíritu Santo, en la «Iglesia creyente y orante»Sigue leyendo «LA TRADICIÓN DE LA ORACIÓN»

Concilio de Trento

El Concilio Tridentino ya había reconocido el gran valor catequético contenido en la celebración de la Misa, pero no le fue posible deducir todas las consecuencias prácticas. De hecho, muchos solicitaban que se permitiera el uso de la lengua vernácula en la celebración del sacrificio eucarístico. Pero el Concilio, teniendo en cuenta las circunstancias queSigue leyendo «Concilio de Trento»

Presencia real de Cristo en el Altar

También el admirable misterio de la presencia real del Señor bajo las especies eucarísticas, confirmado por el Concilio Vaticano II[6] y por otros documentos del Magisterio de la Iglesia[7], en el mismo sentido y con la misma autoridad con los cuales el Concilio de Trento lo había declarado materia de fe,[8] es manifestado en laSigue leyendo «Presencia real de Cristo en el Altar»

El Memorial de nuestra Salvación

Lo que así fue enseñado por el Concilio está sobriamente expresado por fórmulas de la Misa. Así lo pone ya de relieve la expresión del Sacramentario llamado Leoniano: «cuantas veces se celebra el memorial de este sacrificio se realiza la obra de nuestra redención».[3] Esto se encuentra acertada y cuidadosamente expresado en las Plegarias Eucarísticas;Sigue leyendo «El Memorial de nuestra Salvación»

Testimonio de fe inalterada

La naturaleza sacrificial de la Misa afirmada solemnemente por el Concilio Tridentino, en armonía con la tradición universal de la Iglesia, ha sido expresada nuevamente por el Concilio Vaticano II, al pronunciar estas significativas palabras acerca de la Misa: «Nuestro Salvador, en la Última Cena, instituyó el sacrificio eucarístico de su Cuerpo y de suSigue leyendo «Testimonio de fe inalterada»

Santa Cena

Cuando iba a celebrar con sus discípulos la Cena pascual, en la cual instituyó el sacrificio de su Cuerpo y de su Sangre, Cristo el Señor, mandó preparar una sala grande, ya dispuesta (Lc 22, 12). La Iglesia ha considerado siempre que a ella le corresponde el mandato de establecer las normas relativas a la disposiciónSigue leyendo «Santa Cena»

Sobre el Santo Sacrificio

El Sacrificio de la cruz y el sacrificio de la Misa, son un sólo y mismo sacrificio; porque Aquél que fue inmolado de una manera sangrienta en la cruz, es el mismo que por ministerio de los sacerdotes es inmolado de una manera incruenta en la Santa Misa.Concilio de Trento